Mucho bla, bla, bla, pero nada concreto.
Según Ecologistas en acción, en la cumbre del Clima de Cancún falta voluntad política, que viene a ser lo mismo que no tener verdaderas ganas de cambiar las cosas.
Y sin eso, pasa lo que pasa: se diluyen, se bloquean las negociaciones, no se llega a acuerdos o, dicho en idioma climático, las emisiones siguen descontroladas, y el calentamiento global disparado como un petardo.
Ecologistas en Acción ha expresado su gran preocupación por que Cancún vuelva a ser, como ya ocurrió en Copenhagen, un auténtico desastre.
O sea, una reunión sin acuerdos vinculantes de reducción de CO2, algo que se temen, visto el actual impass en el que se encuentran las negociaciones.
En concreto, la ong denuncia que los países más industrializados hacen lo posible para no asumir compromisos vinculantes de reducción de CO2, y además “están dividiendo a los países más afectados por el cambio climático, chantajeando a Bolivia por mantener una posición coherente”.
Pero no sólo a Bolivia.
Junto con el resto de los movimientos sociales y ong’s reunidos en el Foro Internacional de la Justicia Climática-Diálogo de los Pueblos, en el que participa Ecologistas en Acción, critica las artimañas y los intentos de los países más desarrollados para acabar con el Protocolo de Kioto.
Denuncian estrategias de “chantaje, presión y manipulación” por parte de los países más poderosos, como EE.
UU y la Unión Europea, contra países empobrecidos:Nos llegan informaciones sobre las estrategias de chantaje, presión y manipulación que están utilizando los países poderosos como EEUU y la Unión Europea, contra países empobrecidos, especialmente africanos y Bolivia, presionándoles para un acuerdo sobre REDD (Reducción de las Emisiones por Deforestación y Degradación de los Bosques), que podría resultar en un despojo de tierras inmenso, violando gravemente los derechos humanos de millones de personas.
La ong lamenta que no se busque el objetivo principal y más necesario para detener el cambio climático: alcanzar compromisos vinculantes para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
A su juicio, a los países más desarrollados sólo les interesa salvar del Protocolo de Kioto es la base jurídica de los mercados de carbono:No hay ningún avance en la COP16 por evitar los impactos catastróficos en la población y los ecosistemas del mundo que se generaría si la temperatura media global sube más de 1,5ºC.
Hay una propuesta de convertir las metas voluntarias de reducción contenidas en el No Acuerdo de Copenhague” en medidas vinculantes.
Estas medidas son tan poco ambiciosas que podrían causar un calentamiento global de más de 4ºC.
Estamos en riesgo de que se revierta lo logrado en 18 años de negociaciones a partir de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático y el Protocolo de Kioto, más aún de que se destruya el marco de negociaciones multilaterales sobre el cambio climático en la ONU y que quedemos a merced de las grandes corporaciones y sus gobiernos.
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