Dejando volar la imaginación, los científicos siempre se han hecho muchas preguntas acerca del cómo, del por qué, del cuándo… Pero no siempre encuentran respuestas: un misterio aún sin resolver hace referencia a si las aves evolucionaron como tales desde la tierra, o si echaron a volar desde los árboles.
¿O quizás sí tiene respuesta? Un nuevo estudio apuesta por la segunda opción, tras analizar a una criatura prehistórica llamada Microraptor gui, en la frontera entre los dinosaurios y aves.
Si el estudio está en lo cierto, los antepasados de las aves llevaron una vida arbórea.
Al menos, los científicos creen que la llevó un dinosaurio alado conocido como Microraptor gui, que vivió alrededor de 120 millones de años, y se le considera antepasado de las aves modernas.
¿Pero, cómo era este peculiar dinosaurio? Medía alrededor de 76 centímetros, tenía plumas y, por lo demás, su aspecto era típico de dinosaurio: su cabeza, sus escamas y sus afilados dientes.
Ahora voy a hablaros de sus patas, ya que merecen mención aparte.
Medían unos 18 centímetros y, lo mejor de todo, éstas podrían ser la clave para responder a nuestra pregunta.
Así, mientras algunos científicos dicen que Microraptor podría haberlas utilizado para caminar, el nuevo estudio parte de la premisa contraria, es decir, afirma que no podían servirles como pies.
Así lo razona David Alexander, líder de la investigación y profesor de la Universidad de Kansas:Con grandísimas plumas sobre sus pies, no puedo imaginar cómo podría maniobrar sobre la tierra, porque al extenderse sus patas también lo hicieron sus plumas y ello significaba un grave impedimento para caminar.
(Traducción libre)Asimismo, el equipo investigador, de la Universidad de Kansas y la Universidad de Northeastern en China, simularon una réplica de plástico del dinosaurio para responder a una segunda pregunta: ¿podía volar?La respuesta es que sí.
Estudiando los movimientos del modelo construido, llegaron a la conclusión de que su cadera estaba rota de un modo que le hubiera permitido echar sus patas traseras a un lado para elvuelo.
En palabras de Alexander:Hemos sido capaces de articular los huesos de la cadera para demostrar que podía volar.
Las pruebas nos han convencido de que el animal no podía correr en el suelo, pero podría haber volado, y si bajó al suelo fue en alguna situación de emergencia.
Todos no pensarán como nosotros, pero para nosotros la evidencia es total (Traducción libre)Vía
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