Navegando por la red he encontrado una reflexión muy interesante acerca del futuro de la industria automovilística y de los coches híbridos.
Lejos de tratar el tema desde una perspectiva occidental y de centrarse en las nuevas tecnologías y ahorro energético que significarán estos nuevos modelos, el artículo reflexiona sobre cómo les irá con esta nueva industria a los países generadores de materias primeras.
El artículo toma como ejemplo el caso de Bolivia y su riqueza en litio, elemento químico indispensable para fabricar las baterías de los nuevos vehículos híbridos o eléctricos.
El artículo subraya sus dudas sobre cómo puede afectar la eclosión de esta industria en un país como Bolivia.
Básicamente, lo que viene a decir es que, pese a que Bolivia se vuelva la niña de los ojos de las grandes empresas automovilísticas, esto no quiere decir que sea beneficioso para el país.
Para demostrar sus teorías, pone como ejemplo los casos de Arabia Saudí o Venezuela y muestra que, pese a poseer petróleo, la calidad de vida de sus ciudadanos no ha ido a mejor.
En este sentido, el articulista pone en duda la capacidad de gestión del actual presidente del país, Evo Morales, y asegura que no le gustaría ver a otro país más expoliado de sus recursos naturales en favor del primer mundo.
Excusándose en el caso de Hugo Chaves, el populismo sudamericano que tan de moda está no parece hacerle ni pizca de gracia al autor de la reflexión.
Por otro lado, la extracción de litio conlleva un alto riesgo tan humano como medio ambiental.
No nos engañemos, las minas actualmente no son mucha más seguras que hace 100 años y prueba de ello son los casos de trabajadores atrapados en túneles que de tanto en tanto gotean los informativos que miramos impávidos.
A parte, la extracción y el posterior tratamiento del litio es altamente contaminante y habrá que ver cómo lo gestiona el país sudamericano para que eso no se convierta en un problema medio ambiental.
No hace mucho, la web www.
hybridcars.
com informó que Bolivia era el principal exportador de Litio del mundo pero, pese a ello, había muchas trabas administrativas para que las empresas se instalasen en su territorio.
Lo que puede ser un problema para compañías como Toyota o Mitsubishi, son mecanismos de protección de Evo Morales para impedir que el expolio se lleve a cabo en su país en nombre del falso progreso y el ecologismo de pacotilla.
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