Categorías: Medio ambiente
|
27 marzo, 2020 10:27 pm

Una nueva tecnología consigue azúcar a partir de bacterias fotosintéticas

Compartir

La hay blanquilla o morenilla …y pronto podría haber un azúcar verdecilla porque, de producirse masivamente, este invento sería un gran paso hacia una economía más ecológica.
Pero empecemos por el principio.
Hablamos de un gran descubrimiento científico: investigadores del Instituto Wyss, en Harvard, y la Harvard Medial School, han diseñado bacterias fotosintéticas para producir azúcares simples y ácido láctico.

Advertisements

Se trata de una innovación que permitiría caminar hacia un planeta sostenible.
Esta nueva manera de producir azúcar , según se publica en la edición de junio de Applied and Environmental Microbiology, se basa en una tecnología que permite utilizar la luz solar y el CO2, a través de un procedimiento en el que las bacterias realizan la función fotosintética.

Advertisements

Las bacterias han sido modificadas genéticamente, y la comercialización de este azúcar podría reducir las ingentes emisiones de dióxido de carbono asociadas con el transporte de azúcar desde los países productores.
Igualmente, se ahorraría en costos de producción, pudiéndose fabricar en cualquier lugar del mundo.

El hallazgo tendría otra enorme ventaja verde: se obtendrían plásticos biodegradables de forma más ecológica, ya que el ácido láctico es un elemento fundamental en su producción.
Recordemos que el azúcar se produce, sobre todo, a partir de remolacha o de caña de azúcar, que crece sólo en climas tropicales y subtropicales.
Por cierto, este equipo de investigadores también está trabajando para lograr hidrógeno y biocombustibles a través de fórmulas ecólogicas.
Y, para terminar, sólo una pregunta: ¿Cómo recibirá nuestro organismo ese azúcar que viene de bacterias genéticamente modificadas?.
Una cuestión, cuanto menos, inquietante.
Vía

Más leídos

La llegada de una nueva DANA a España ha puesto en alerta a varias Comunidades tras las olas de calor sofocantes en nuestro país.

Aquí están, recomendados como destinos de viaje para aquellos que obviamente no tienen un sentido del olfato hipersensible.

';