No existe un vinagre para el pelo específicamente pero sí una corriente de opinión acerca de cuál –o cuáles- tipo de vinagre es mejor.
La mayoría de los consejos sobre el uso del vinagre como limpiador, purificador y abrillantador del pelo, hacen referencia al vinagre blanco, que es elaborado de la fermentación del alcohol puro de caña de azúcar.
Regan Hennessy, de Livestrong, cita a varios autores de populares libros de belleza que recomiendan el uso del vinagre blanco diluido en agua para otorgar brillo y limpieza profunda al cabello.
Por ejemplo, Joe Green, autor del libro Joe Green’s Supermarket Spa, asegura que el vinagre blanco proporciona un aclarado barato que puede ayudar a controlar la grasa en el pelo.
Al vinagre blanco también se le atribuye la cualidad de conservar el color del pelo (teñido o natural), un poder anticaspa y apaciguador de picores del cuero cabelludo, astringente y tónico que da brillo y facilita el desenredado.
Cómo usar el vinagre en el pelo depende del objetivo que se busque.
Una fórmula clásica para su uso como potenciador del brillo del pelo es ésta: Toma una botella, y sobre medio litro de agua vierte 1 /4 de taza de vinagre, a la que puedes añadir un chorrito de zumo de limón o naranja.
Una vez tengas listo este preparado, lavamos la cabeza normalmente, y después del enjuague vierte el contenido del la botella, sin escurrirlo hasta pasados 2 minutos.
Luego, retirar el exceso de agua y envolver en una toalla, sin frotar ni presionar el cabello.
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