Daniel Noboa asume como nuevo presidente de Ecuador, sucediendo a Guillermo Lasso y convirtiéndose en el presidente más joven en la historia de Ecuador.
Daniel Noboa Azin asume como nuevo presidente de Ecuador, sucediendo a Guillermo Lasso y convirtiéndose en el presidente más joven en la historia de Ecuador.
Daniel Noboa nuevo presidente de Ecuador
El presidente electo hizo su juramento el jueves y asumió el mando como nuevo jefe de Estado en una ceremonia de investidura celebrada en la Asamblea Nacional (Parlamento).
Noboa sucedió al mandatario saliente, Guillermo Lasso.
Con tan solo 35 años, Noboa, se convierte en el presidente más joven en la historia de Ecuador.
Luego de recibir la banda presidencial del presidente de la asamblea, Henry Kronfle, inicia un mandato de año y medio para completar el periodo 2021-2025 tras la aplicación de la ‘muerte cruzada’ por el exmandatario Lasso.
Este mecanismo constitucional llevó a nuevas elecciones, en las que Noboa se impuso en la segunda vuelta a Luisa González.
Noboa inicia su mandato acompañado de la vicepresidenta, Verónica Abad.
Prioridades de la nueva administración
Noboa asume la presidencia de Ecuador, en un contexto de crisis de inseguridad y una situación económica complicada.
Como primeras acciones en su presidencia, Noboa ha anunciado su intención de declarar un estado de excepción para acelerar el trámite de reformas tributarias y eléctricas en el Parlamento.
Estos decretos, enfocados en abordar los problemas de empleo y electricidad heredados, se firmarán en su primer día en el Palacio de Carondelet.
Además, se espera la pronta designación de algunos ministros, aunque la conformación completa del gabinete se conocerá más adelante, manteniendo en suspenso las carteras de Interior y de Defensa Nacional.
En su mensaje inicial como presidente, Daniel Noboa hizo un llamado a la unidad de los ecuatorianos; instando a dejar atrás viejos esquemas políticos para enfrentar juntos los retos del país, como el desempleo y la creciente violencia.
Este pedido de cohesión marca un tono de esperanza y colaboración para su gobierno, que se enfrenta a importantes desafíos en un periodo relativamente corto.