Rusia moderniza su flota submarina con tecnología hipersónica ante tensiones con Ucrania, generando una preocupante alarma nuclear.
A medida que avanza la invasión rusa en Ucrania, crecen los temores sobre una potencial amenaza nuclear.
Una alarma que se ha intensificado al conocer que Rusia está equipando sus nuevos submarinos nucleares de la clase Yasen-M con misiles hipersónicos Zircon.
El lunes, el director general de la Corporación Unida de Construcción Naval (USC), Alexey Rajmánov, ha confirmado esta actividad en una entrevista a la agencia estatal de noticias ‘RIA Novosti’.
Rajmánov ha asegurado que «los submarinos nucleares polivalentes del proyecto Yasen-M serán equipados regularmente con el sistema de misiles Zircon».
Según el jefe del mayor constructor naval de Rusia, «ya se está trabajando en esta dirección».
Los misiles hipersónicos Zircon son armas de largo alcance que viajan a nueve veces la velocidad del sonido (10.000 km/h), convirtiéndolos en objetivos difíciles de detectar e interceptar.
Estos misiles pueden ser lanzados tanto desde el mar como desde tierra.
Los Zircon se están armando en los submarinos nucleares polivalentes Yasen-M, también conocidos como Proyecto 885M.
Según informa ‘RIA Novosti’, estos sumergibles representan una versión modernizada del Proyecto 885.
En la actualidad, la Armada rusa tiene en su poder un submarino del Proyecto 885 y dos del 885M.
Vladímir Putin, presidente ruso, ha advertido en varias ocasiones sobre un potencial ‘apocalipsis nuclear’ en respuesta al incremento de suministros armamentísticos a Ucrania.
Además, en enero, Putin ya había anunciado que Rusia comenzaría la distribución masiva de los misiles Zircon.
Recientes informes sugieren que Rusia ya ha desplegado armas nucleares en Bielorrusia y ha declarado como operativo un torpedo nuclear con la capacidad de generar tsunamis radioactivos.
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