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Un exoficial de inteligencia de EEUU hace declaración juramentada ante el Congreso, asegurando que el gobierno tiene restos biológicos de alienígenas.
En una sorprendente declaración, David Grusch, un antiguo oficial de inteligencia de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, testificó ante un subcomité del Congreso.
Según sus palabras, las autoridades del país tienen en su poder tecnología de origen extraterrestre, así como restos biológicos que pertenecerían a sus presuntos tripulantes.
Las impactantes afirmaciones se dieron en el marco de la mayor desclasificación de documentos sobre ovnis en la historia del país.
Además de Grusch, otros dos militares retirados ofrecieron su testimonio.
Estos aseguraron que las autoridades estadounidenses han detectado en el espacio aéreo del país una amenaza para la seguridad nacional, sin importar su origen.
El testimonio de Grusch fue uno de los más impactantes de la sesión.
Este afirmó que el Gobierno de Estados Unidos tiene un programa dedicado a estudiar la supuesta tecnología extraterrestre y a intentar reproducirla a través de la ingeniería inversa.
Según su testimonio, algunos de los que han trabajado con esta tecnología han sufrido accidentes al manipular los equipos.
Los testimonios apuntan a la necesidad de un sistema más transparente y seguro para reportar los incidentes con objetos voladores no identificados (ovnis), a fin de proteger la reputación de quienes los reportan.
En esta línea, Ryan Graves, antiguo piloto de un avión de combate F-18 de la Marina, aseguró que «si los ovnis son drones extranjeros, son un urgente problema para la seguridad nacional».
David Gravor, también un excomandante de la Marina, testificó sobre un avistamiento que tuvo en 2004 de un ovni con la forma de un tic tac, un popular caramelo norteamericano.
Gravor alegó que el objeto volador tenía capacidades de vuelo más allá de la tecnología conocida en Estados Unidos.
Graves declaró que, si Estados Unidos posee este tipo de tecnología, «necesita ser supervisada» por los legisladores.
Los testimonios y las revelaciones han dejado en claro que hay mucho que el Gobierno aún debe responder sobre los avistamientos de ovnis y su relación con la seguridad nacional.
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