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En marzo de 2020, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC) emitieron una orden de salud pública conocida como Título 42 para frenar la propagación del covid-19.
Bajo esta política, las autoridades pueden expulsar rápidamente a los migrantes en las fronteras terrestres que representen un riesgo para la salud.
La política es conocida como Título 42 por la parte del código de EE.UU. que permitió que el director de los CDC la emitiera.
Los funcionarios pueden prohibir la entrada a quienes hayan ingresado ilegalmente al país para eludir las medidas de detección médica.
Los migrantes detenidos no son retenidos en áreas congregadas para su procesamiento y son expulsados inmediatamente a su país de último tránsito.
Después de que la administración Biden anunciara planes para rescindir la orden en abril de 2022, se desató un debate sobre si está justificado terminar su aplicación y si los funcionarios están preparados para manejar un aumento esperado de inmigrantes en la frontera.
Los republicanos utilizaron la derogación del Título 42 como tema de conversación para atacar a los demócratas en materia de inmigración.
Los demócratas argumentaron que la administración no tenía un plan claro para hacer frente a la oleada de inmigrantes. Los defensores de los derechos de los inmigrantes argumentaron que los funcionarios estaban usando la salud pública como pretexto para mantener fuera del país a la mayor cantidad posible de inmigrantes.
Los expertos en salud pública también criticaron la política y dijeron que no estaba justificada por las circunstancias.
La política migratoria fue controvertida desde el momento en que la administración Trump la anunció. Muchos defensores esperaban que el presidente Biden levantara la orden cuando asumiera el cargo, dadas las promesas de su campaña de construir un sistema de inmigración más humano.
En cambio, su administración extendió la política y la defendió durante meses en los tribunales. Los estados de Arizona, Louisiana y Missouri llevaron la lucha por el Título 42 a los tribunales en abril de 2022, argumentando que no se habían seguido los procedimientos adecuados cuando la administración anunció el fin de la política.
Desde entonces, más de una docena de estados, en su mayoría liderados por el Partido Republicano, se han sumado a la demanda.
La política migratoria Título 42 llegará a su fin este 11 de mayo de 2023. Se espera que esto tenga un impacto significativo en la frontera sur de EE.UU., ya que los migrantes que antes habían sido expulsados rápidamente ahora podrán solicitar asilo en los Estados Unidos.
La administración Biden ha anunciado que reemplazará el Título 42 con un sistema de inmigración más justo y humano.
Aunque la orden del Título 42 expirará el 11 de mayo, aún no está claro cómo será el proceso de entrada para los migrantes en la frontera.
El gobierno de Biden ha dicho que planea trabajar con los gobiernos de México y los países centroamericanos para abordar las causas subyacentes de la migración, incluyendo la violencia y la pobreza.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) también ha dicho que planea aumentar la capacidad de procesamiento en la frontera, lo que podría significar que los migrantes podrían ser detenidos durante más tiempo mientras se procesan sus solicitudes de asilo o se llevan a cabo otros procedimientos de inmigración.
Los expertos también han advertido que el fin del Título 42 podría provocar un aumento en la migración, especialmente si se combina con otras políticas de inmigración más permisivas de la administración de Biden, como la eliminación de las restricciones de asilo de la era Trump.
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