Preocupación tras el golpe de Estado en Sudán. El conflicto ha generado intensos enfrentamientos desde hace tres días entre el ejército y un poderoso grupo paramilitar.
El Ejército sudanés ha señalado poco después que no tenía «conocimiento de ninguna coordinación con los mediadores.
Y la comunidad internacional sobre una tregua. La declaración de por parte de la rebelión pretende encubrir la aplastante derrota que recibirá en unas horas». Así lo declaró en un comunicado. Más de 185 personas murieron y al menos 1.800 resultaron heridas en Sudán por los intensos combates que desde hace tres días enfrentan al ejército y a un grupo paramilitar.
Así lo informó Naciones Unidas este lunes 17 de abril.
Por su parte, la Unión Europea denunció que su embajador «fue atacado en su propia residencia», aunque está bien. Además, un convoy diplomático estadounidense recibió disparos, explicó el secretario de Estado, Antony Blinken. «Toda nuestra gente está a salvo e ilesa», dijo ante la prensa Blinken, quien tildó la acción de «insensata». Más de 185 personas murieron y 1.800 resultaron heridas desde que empezaron los choques. «La situación es muy cambiante. Es difícil evaluar en qué sentido evoluciona el equilibrio», explicó Perthes desde Jartum.
Al menos dos hospitales de la capital están evacuados «mientras los cohetes y las balas acribillaban sus paredes». Así lo alertaron los médicos. Ellos afirman haberse quedado sin bolsas de sangre y sin material sanitario. Además, numerosas oenegés y agencias de la ONU suspendieron sus actividades ante los saqueos y las «graves vulneraciones» ocurridas contra su personal.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, instó a los dos generales a cesar «inmediatamente las hostilidades».
Cinco muertos y casi 400 evacuados al chocar un avión comercial con una aeronave de la Guardia Costera en un aeropuerto de Tokio, Japón.
Análisis de las estrategias geopolíticas actuales en Europa y Oriente Medio