Temas cubiertos
Una menor de 15 años sufre una brutal agresión en Portugal. Una treintena de alumnos agredió a una compañera y lo compartió en redes sociales.
Conmoción en Cascais tras conocer el último caso de bullying y de acoso que ha sufrido una menor de 15 años. Según han apuntado diferentes medios locales portugueses, una adolescente de 15 años ha sufrido la brutal agresión por parte de una treintena de compañeros de clase.
Al parecer, el suceso ocurrió cuando la adolescente salió de clase y los agresores decidieron propinarle diferentes golpes mientras todos lo grababan y, después, lo compartían a través de las redes sociales.
La adolescente resultó agredida cerca de la escuela donde estudia en el municipio portugués de Cascais. Está a unos 30 kilómetros de Lisboa. La agredieron una treintena de compañeros, que subieron a redes sociales el vídeo del linchamiento. Todo comenzó por una disputa entre dos grupos de alumnos. Al parecer, una de las alumnas del centro educativo decidió avisar a varios compañeros para que esperaran a la víctima al salir de clase y, en ese momento, se produjeron las agresiones, que fueron compartidas en redes sociales. La víctima tuvo que acudir al hospital debido a las heridas que sufrió en el linchamiento.
Tras la pelea verbal, la confrontación derivó en la agresión, que se produjo fuera de la escuela, y la joven tuvo que recibir atención médica en el hospital debido a las heridas que le ocasionó este linchamiento. La víctima denunció la situación a la Guardia Nacional Republicana (GNR), que la remitió al Ministerio Público. Ahora, el caso se encuentra bajo investigación y los agentes tratan de identificar a la treintena de agresores que lincharon a la adolescente de solo 15 años. Al parecer, el suceso ocurrió cuando la adolescente salió de clase y los agresores decidieron propinarle diferentes golpes mientras todos lo grababan y, después, lo compartían a través de las redes sociales en Portugal.
Cinco muertos y casi 400 evacuados al chocar un avión comercial con una aeronave de la Guardia Costera en un aeropuerto de Tokio, Japón.
Una mujer llamada Susan solicitó el divorcio después de mirar una foto tomada con su familia y descubrir un terrible secreto.