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Una jauría de perros mata a un niño de siete años y hiere a su madre en Estados Unidos. Los dueños de los perros no se encontraban en la finca cuando ocurrió el ataque.
Un niño de siete años ha perdido la vida y su madre ha resultado herida tras el ataque de cuatro perros en Fort Hall, en Estados Unidos. Los hechos los han comunicado los miembros de las tribus de Shoshone-Bannock en Facebook.
El ataque tuvo lugar el 21 de enero a las 17.30 horas de la tarde. La Policía de Fort Hall recibió una llamada avisando del ataque de cuatro perros a un menor en una residencia de la localidad. Entonces los oficiales llegaron al lugar de los hechos y las dos víctimas ya estaban recibiendo asistencia médica en una ambulancia.
La madre y el niño terminaron en el hospital local de la zona, Portneuf Medical Center en Pocatello, a 32 kilómetros de donde ocurrió el ataque en Idaho. El niño perdió la vida al llegar. La madre, Emily Islas, resultó gravemente herida tras luchar contra los perros para salvar la vida de su hijo. Según la CNN, Emily se acostó encima del pequeño en un intento de servir de escudo contra los zarpazos y mordiscos de los perros. Las víctimas residían en una casa colindante a la propiedad donde ocurrieron los hechos. El pequeño salió de su vivienda y, después de estar unos minutos sin regresar, su madre decidió salir en su busca. Emily Islas encontró a su hijo acostado boca a bajo y con los cuatro animales encima.
Los dueños de los perros y de la propiedad donde tuvo lugar el ataque eran una pareja que no estaba en ese momento en la vivienda. Posteriormente a los ataques, la pareja fue citada por 15 violaciones de la Ordenanza de Animales de las Tribus. Los cargos de los que les acusan es de ataque de animal, de no tener a los perros vacunados contra la rabia y de no contar con las licencias pertinentes para tener cuatro animales de ese tipo en casa, entre otros. Todo ello según ha informado Native News Online.
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