Jacinta Ardern dimite como primera ministra de Nueva Zelanda en un acto de sinceridad política sin precedentes: "No puedo continuar".
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Dimite la primera ministra de Nueva Zelanda: «No tengo energía». La política laborista, aguantando las lágrimas, abandona su puesto dando una lección de responsabilidad. Lo hace al no tener «el depósito lleno y algo más en la reserva para afrontar los retos inesperados».
Dimite la primera ministra de Nueva Zelanda
La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, ha anunciado este jueves 19 de enero que abandonará su cargo el próximo mes de febrero. Lo hará ante la falta de «energía» para ser reelegida en octubre.
La líder del Partido Laborista ha asegurado que no puede «seguir con el trabajo». «Es el momento». Es lo que ha decidido afirmar mientras trataba de contener las lágrimas insistiendo en la «responsabilidad que conlleva este trabajo». En su discurso, Ardern ha hecho un esfuerzo por mantener las lágrimas y así poder explicar los motivos de su dimisión. «No lo dejo porque sea duro, lo dejo porque no tengo suficiente energía para hacerle justicia».
“No tengo el depósito lleno»
«Liderar un país es el mayor privilegio que nadie puede tener, pero también uno de los trabajos más exigentes», ha explicado. “No tengo el depósito lleno y algo más en la reserva para afrontar los retos inesperados». La política revalidó su puesto en octubre de 2020 con una mayoría aplastante. Explica que sus planes ahora mismo consistirán en pasar más tiempo con su familia mientras sigue «ayudando a Nueva Zelanda». El próximo 22 de enero la someterán a votación en el seno del partido la persona que tomará el testigo de Ardern. Desde el PL consideran que el proceso no durará mucho para no seguir sin sucesor tras el anuncio del viceprimer ministro, Grant Robertson. Este no aspira a liderar su facción en las elecciones del próximo 14 de octubre.
Su madre ya era primera ministra
Ella pretendía revalidar por tercera vez su mandato en el país. Por ello su dimisión ha producido la ventaja a la oposición del Partido Nacional. Ante esta posible caída de los apoyos al PL, la política ha insistido en que su formación «ganará las elecciones». Mientras anunciaba que dejaba su puesto, ha insinuado que su objetivo en este momento es dedicarse a su hija Neve. Esta comenzó a dar sus primeros pasos cuando su madre ya era primera ministra. En 2018, cuando tan solo tenía tres meses, su hija acudió a la Asamblea General de la ONU en Nueva York en los brazos de una Ardern que ha tratado de normalizar y compatibilizar su rol al frente de la jefatura del Estado con sus obligaciones como madre.
