Protestas en Shanghái por el confinamiento masivo de la ciudad por covid

Miles de personas salen para protestar en las calles de Shanghái por el mayor confinamiento de una ciudad en la pandemia del covid.

Protestas en las calles de Shanghái por el mayor confinamiento por covid desde el inicio de la pandemia.

Shanghái, ante el mayor confinamiento de la ciudad desde el inicio del covid

Una gran cantidad de los habitantes de Shanghái han protestado contra el confinamiento a millones de personas decretado por China.

«Dejadnos salir», han gritado los vecinos de un edificio situado a las afueras de la ciudad. Las autoridades chinas han mitigado las manifestaciones contra esta medida, enmarcada en la política cero coronavirus del gigante asiático.

Este es el mayor confinamiento aplicado a una ciudad en China desde los primeros casos a finales de 2019 en Wuhan.

¿El motivo? El repunte de contagios que atraviesa la capital financiera, que cuenta con 25 millones de habitantes, más de la mitad que la población de España. El sábado 2 de abril registró 2.678 infecciones, más de la mitad de las contabilizadas dicho día en el país.

Protestas por el confinamiento masivo por covid en Shanghái

Lo cierto es que el confinamiento afecta desigualmente a la población, ya que está dividido geográficamente. Comenzó este lunes 2 de abril y estará vigente en el lado oeste hasta el 5 de abril. Por su parte, en el este lo estará hasta el 1 de abril. Las calles han quedado desiertas, lo que recuerda a lo vivido en Wuhan hace dos años. El transporte público está suspendido y se ha recomendado el teletrabajo, la otra opción es detener la actividad laboral de cualquier empresa.

La situación del coronavirus en China

El confinamiento, además, ha revivido otros fantasmas del pasado. Los habitantes han vaciado los supermercados con compras de pánico. Este escenario es muy polémico para el Gobierno, que ha mostrado imágenes en las que voluntarios entregan comida a los habitantes. Igualmente, han vuelto a habilitar los hospitales de campaña para aislar y tratar a los infectados por el patógeno. Por su parte, China ha sido muy reacia en cuanto a la comunicación de los datos epidemiológicos. Según la Organización Mundial de la Salud, el 88% de su población está vacunada con pauta completa.