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Putin reconoce a los territorios separatistas y decide enviar allí sus tropas. El presidente ruso logra con esta decisión dejar a Occidente descolocado y a Kiev con la duda de otro posible conflicto armado.
Rusia comenzó este lunes 21 de febrero por la noche a sustraer otro territorio a Ucrania. Vladímir Putin decidió romper la tregua y reconocer la independencia de los territorios separatistas de Donetsk y Lugansk. De esta forma pone fin a la paz en Ucrania.
El país había logrado contener las muertes, pero no estaba ofreciendo a Moscú lo que solicitaba. El líder ruso dio instrucciones para desplegar el ejército ruso en estos territorios rebeldes de Ucrania. Además, ordenó al Ministerio de Defensa ruso que envíe fuerzas «en misión de paz» a estas zonas de Donbas. Por otro lado, también pidió a su ministro de Relaciones Exteriores que establezca relaciones diplomáticas con las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk. Las medidas entraron en vigor de inmediato, según el Kremlin.
Por su parte, el canciller alemán, Olaf Scholz, acordó con el francés Emmanuel Macron y con el estadounidense Joe Biden que la decisión no quedaría sin respuesta, según informó la Cancillería. «Biden condenó enérgicamente la decisión del presidente ruso Putin de reconocer la «independencia» de las llamadas regiones DNR y LNR de Ucrania», en una llamada con el presidente de Ucrania, Volodimr Zelenskiy, según la Casa Blanca.
Firmaron en el año 2015 los acuerdos de Minsk. Por aquel entonces Ucrania estaba acorralada por los combatientes separatistas y las tropas rusas. Estos daban un mayor poder a los territorios sublevados. La razón es que allí Rusia tiene más capacidad de influencia. Lo cierto es que nadie ha cumplido lo pactado y Rusia ha decidido dejar a Occidente descolocada y a Kiev con la duda de otro conflicto armado.
«La seguridad de Ucrania puede amenazar la seguridad de Rusia», denunció Putin a la OTAN. «Es una cuestión de tiempo, y los riesgos para Rusia surgirán de una manera decisiva, ataques relámpago y ataques preventivos».
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