Los talibanes decapitan a los maniquíes de las tiendas porque es contraria a la ley islámica y "cubrir la cabeza de los maniquíes no será suficiente".
Los talibanes decapitan a los maniquíes de las tiendas porque es contraria a la ley islámica y «cubrir la cabeza de los maniquíes no será suficiente».
Los talibanes decapitan a los maniquíes
Las tiendas de la provincia de Herat han comenzado a cortar la cabeza de los maniquíes.
El Ministerio de Propagación de la virtud y Prevención del Vicio del Gobierno talibán recomienda a los vendedores implementar la medida por considerarlas figuras en contra de la ley islámica.
VIDEO: Taliban beheading mannequins of clothing stores while saying «Allah Akbar».
The Taliban have ordered a series of mannequin beheadings, telling clothes shops to remove the heads of dummies that offend Islam.
VIDEO👇 pic.twitter.com/1jIDynKQyY
— Nadia Momand (@NadiaMomand) January 3, 2022
«Les dijimos a los comerciantes que si quieren mostrar la ropa en los maniquíes, deben cortarles la cabeza, lo que no creará problemas para exhibir las prendas», explicó este martes Shaikh Abdul Aziz, director del Ministerio de Propagación de la virtud y Prevención del Vicio.
Solo «aconsejamos y sugerimos a los comerciantes que corten las caras de los maniquíes», añadió el funcionario del régimen talibán, que aclaró que no se ha pedido que se destruyan los maniquíes por completo.
Estas nuevas reglas se han impartido solo entre los comerciantes de Herat, aunque desde la caída de Afganistán en manos de los islamistas el pasado agosto, las figuras femeninas han ido desapareciendo de los aparadores en las tiendas de todo el país.
Ministerio de Promoción de la virtud y Prevención del Vicio
El Ministerio de Promoción de la virtud y Prevención del Vicio fue una de las instituciones más temidas en el primer gobierno de los talibanes en Afganistán, entre 1996 y 2001, recordado por las duras medidas que recluyeron a las mujeres en casa, prohibieron la reproducción de música, y castigaron con dureza todo lo que se considerara fuera de la ley islámica.
La poderosa institución se extinguió tras la caída del régimen con la invasión estadounidense, y durante los siguientes 20 años era solo un mal recuerdo para los afganos.
El ministerio fue reinstalado por los talibanes tras su victoria en la guerra, y su nueva sede ocupa ahora lo que durante las últimas dos décadas fue el ahora extinto Ministerio de la Mujer.
Desde su reaparición, los talibanes han recomendado a los taxistas no transportar a mujeres sin velo, y también han prohibido la emisión de películas «inmorales» y eliminado los rostros femeninos de los escaparates.