Las autoridades han detenido a una enfermera que fingía inocular las vacunas contra la covid19 a cambio de 400 euros. Ha ocurrido en Italia.
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Las autoridades han detenido a una enfermera que fingía inocular las vacunas contra la covid19 a cambio de 400 euros. Ha ocurrido en Italia.
La enfermera fingía poner vacunas
Una enfermera ha sido detenida en Palermo, Italia, por simular que inyectaba vacunas contra la Covid-19.
Lo hacía a personas que no querían recibir la dosis, pero necesitaban el certificado de vacunación, necesario en el país para numerosas actividades, entre ellas, acceder al transporte público.
La mujer vaciaba el líquido de una gasa vacía y después pinchaba la aguja en el brazo sin contenido.
Además, por esta actividad cobraba 400 euros.
Entre la decena de «clientes» que fingieron vacunarse para conseguir el certificado de vacunación se ha identificado a los dos detenidos, así como un policía de la comisaría de Palermo y otra enfermera del mismo centro.
La investigación ha sido posible gracias a las grabaciones de una cámara situada en el centro de vacunación donde ella trabajaba. En este fraude, también ha sido detenido uno de los líderes del movimiento antivacunas en Italia, Filippo Accetta, y uno de sus cómplices, Giuseppe Tomasino.
3 detenidos por el fraude
Este es uno más de los fraudes detectados en Italia tras la implantación del denominado ‘Green Pass’ , aunque, no obstante, la Policía ha informado de que este se trata de un «hecho aislado» a pesar de que los compañeros del área sanitaria se sienten «traicionados».
Dos de los pacientes que recurrieron a esta enfermera para falsificar su certificado covid, han sido identificados y la Policía ha bloqueado su pasaporte. Se calcula que podría haber, al menos, una decena de ‘clientes’.
Los agentes han bloqueado su certificado, necesario para acceder a restaurantes y locales de ocio en Italia, y han anunciado que suspenderán al policía y a las enfermeras, que necesitan estar vacunados para trabajar.
Certificado covid en Italia
El nuevo certificado, en poder de los ciudadanos vacunados y de quienes hayan superado la enfermedad, se puso en marcha a principios de diciembre. Es necesario para acceder al interior de bares, restaurantes, cines y teatros, pero también para entrar en eventos deportivos, discotecas, fiestas y ceremonias públicas, y estará vigente, en principio, hasta el próximo 15 de enero. Con esta medida, Italia se suma a la senda marcada por Alemania, con un confinamiento ‘de facto’ de los no inmunizados.
