Hay ocho países en el mundo donde la palabra Navidad no existe ni se celebra, la mayoría de ellos están liderados por regímenes autoritarios.
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Aunque parezca raro, hay países en el mundo donde no se celebra la Navidad. Una festividad que se prohíbe celebrar de forma pública e incluso en ocasiones, de manera privada.
Son en total ocho los países en los que no existe el espíritu navideño, ya que lo tienen totalmente prohibido. Esto es debido en gran parte a la religión y a sus gobiernos autoritarios. A continuación enumeramos los rincones del mundo donde no tiene lugar la festividad y la razón particular que les lleva a no celebrarlo.
Arabia Saudí
Este es un país que se rige por la religión musulmana, por lo tanto no celebran la Navidad. De hecho las personas que se atrevan a hacerlo podrían ser perseguidas. A pesar de ello, existe una pequeña minoría de población que sí la celebra, pero siempre en privado sin poder hacer ningún tipo de demostración en público ya que el Gobierno lo tiene totalmente prohibido.
Argelia
El 98% de sus habitantes son musulmanes, por lo tanto tampoco celebran la Navidad.
Tailandia
Es un país donde no se celebra esta festividad, pero sí permite decorar sus hoteles y restaurantes. Además, los turistas que lo visitan pueden encontrar cenas y comidas de Nochebuena y Navidad.
Tayikistán
Este es otro país donde cerca de ocho millones de personas son de credo musulmán. Su gobierno es laico, pero desde que en el 1991 se separó de la Unión Soviética, está dirigido por el líder musulmán, Emomali Rahmon, un gobernador autoritario que ha sido reelegido hasta en cuatro ocasiones.
Rahmon tiene totalmente prohibido cualquier tipo de fiesta que esté relacionada con la Navidad, el fin de año o bodas y cumpleaños que estén por fuera del islam. No se puede poner el árbol de Navidad, intercambiar regalos o los disfraces de Papá Noel.
Brunéi
Un país del todo hostil para cualquier cristiano, desde el año 2014 las autoridades del Estado prohibieron la Navidad. Hasta el punto de que quien la celebre puede pasar cinco años metido en una cárcel.
Fue en 2015, cuando la cadena ‘Aljazeera’ específico que la prohibición se extendía en todo estos términos: «símbolos religiosos como cruces, encender velas, poner árboles de Navidad, cantar pistas religiosas, enviar felicitaciones navideñas está en contra de la fe islámica”.
Somalia
Su población es en gran parte musulmana, sin embargo, todas las guerras internas lo han convertido en un país inestable socialmente. Obligando a que muchos de sus habitantes hayan tenido que huir a otros lugares de Asia, África y Europa para vivir mejor.
Todo ello derivó en que cuando esas familias y personas regresaban a Somalia, traían consigo tradiciones occidentales de los lugares donde fueron a refugiarse. Por ello, las autoridades del país aprobaron en 2009 la religión musulmana del Estado, y en 2015 dictaron que cualquier evento o celebración por fuera de la religión, quedaba totalmente prohibida.
China
Es actualmente uno de los países del mundo con más superpoblación. Allí celebrar la Navidad se considera una ofensa total a las tradiciones ancestrales, llegando a castigar a aquellos que se atrevan a hacerlo con detenciones y multas económicas.
Fue en el año 2018, cuando las autoridades chinas ordenaron a todos sus habitantes que promovieran únicamente las tradiciones chicas y la cultura del país, evitando así las celebraciones navideñas.
En ciudades como Langfang, se tiene vetado a todos los grandes comercios que vendan artículos navideños. Mientras que a las personas que tienen trato con los cristianos que celebran la Navidad, se les recomienda que les guíen y eduquen hacia los valores fundamentales socialistas, un mensaje promulgado por el presidente de la República Popular China, Xi Jinping, en la cadena NPR.
Corea del Norte
Se considera uno de los países más peligrosos para mantener vivo el espíritu de la Navidad. Está regido por la dinastía de los Kim, a cuyo líder muchos medios de Estados Unidos han llegado a definir como “el Grinch que robó la Navidad”.
Un país que está tan aislado del resto de la civilización que le rodea, que muchos de sus habitantes nunca han escuchado hablar de Jesús, ni mucho menos de lo que es la Navidad y qué celebra.
Desde el año 1948, no se ha celebrado la festividad en Corea del Norte, fecha en la que los Kim entraron a gobernar el país. Lo cierto es que su constitución de forma técnica recoge que está permitida la libertad de religión a sus ciudadanos, así como cualquier ceremonia festiva espiritual o práctica religiosa por parte de una persona o un conjunto de ellas. Sin embargo, la realidad es que cualquier ciudadano que se atreva a celebrarla puede ser encarcelado, o recibir duras sanciones.