El martes 26 de octubre la princesa Mako de Japón se casó finalmente con Kei Komuro, su novio desde la universidad, renunciando así a su estatus real.
El martes 26 de octubre la princesa Mako de Japón se casó finalmente con Kei Komuro, su novio desde la universidad, renunciando así a su estatus real.
La boda de la princesa Mako
La princesa Mako, sobrina del emperador Naruhito, se ha casado esta mañana con Kei Komuro, su novio de la universidad.
Komuro es de origen plebeyo, por lo que al casarse con él, Mako ha perdido su título de princesa y ha dejado de formar parte de la familia imperial.
En vez de la tradicional boda imperial japonesa, Mako y Kei Komuro se han limitado a registrar su matrimonio a través de la casa imperial.
Es la primera mujer de la familia imperial en realizar una boda civil en el Japón de posguerra.
Según la ley japonesa, los miembros femeninos de la familia imperial pierden su posición si se casan con un «plebeyo», aunque esa regla no aplica a los miembros masculinos.
«Casarnos es la única opción que hemos elegido escuchando a nuestro corazón» afirmó Mako frente a los medios en el Hotel Grand Arc Hotel Hanzomon de Tokio, cercano al Palacio Imperial.
«Quiero pasar mi vida con Mako y queremos crear un hogar cálido, apoyarnos en los momentos felices y duros», expresó a su vez su antiguo compañero universitario y ahora marido Kei.
Mako enfrenta a los medios
En una rueda de prensa que la pareja dado el mismo día de la boda, Mako pidió disculpas por cualquier molestia que su matrimonio pudo haber causado al pueblo: «Siento mucho la inconveniencia causada y estoy agradecida a aquellos que han continuado apoyándome», declaró, según un informe del medio público NHK. «Para mí, Kei es irremplazable. El matrimonio fue una opción necesaria para nosotros».
Komuro añadió que ama a Mako y quiere pasar el resto de su vida con ella. «Amo a Mako. Sólo contamos con una vida y quiero que la pasemos con la persona que amamos», dijo Komuro, según lo reporta la agencia AFP. «Me siento muy triste de que Mako haya estado en una mala situación, mental y físicamente, debido a las acusaciones falsas».
Se prevé que la pareja se irá a vivir a Estados Unidos, donde Komuro trabaja como abogado.