Temas cubiertos
El avión Boeing 737 ruso recibió el impacto de un rayo que provocó que los pasajeros entraran en pánico. Muchos de ellos aprovecharon para despedirse por redes sociales.
Un rayo cayó sobre un avión que atravesaba una tormenta. Era un avión ruso, más concretamente un Boeing 737. Dentro del avión el pánico dominó a las 175 personas a bordo. Estas comenzaron a gritar atemorizadas cuando el avión comenzó a descender en caída libre.
La escena la han vivido en pleno vuelo. La aeronave rusa que recibió el impacto de varios rayos es un avión un Boeing 737-900. En la trayectoria que hacía, estaba aproximándose al balneario de Sochi, en el Mar Negro, en el suroeste de Rusia. Fue entonces cuando el avión tuvo que adentrarse en una violenta tormenta eléctrica.
El piloto que había despegado de Ekanterinberg canceló su plan de vuelo. Tuvo que realizar un aterrizaje de emergencia en Krasnodar, a unas 180 millas al norte de Sochi. Sin embargo, pese a los momentos de terror vividos a bordo, todo quedó en un susto.
Rodaron los carritos de los asistentes de vuelo por la cabina. Las botellas y los objetos pequeños recorrían el avión mientras los pasajeros gritaban. Mientras tanto, la luz de los relámpagos no permitían ver lo que estaba sucediendo fuera del interior de la aeronave rusa.
Muchos de los pasajeros del avión no resistieron el ataque de pánico y comenzaron a despedirse de sus seres queridos a través de las redes sociales.
Muchos de los pasajeros decidieron persignarse y abandonarlo todo a la suerte. Otros, sin embargo, lloraron desconsolados ante la impotencia de lo que parecía una muerte segura. El avión ruso, por su parte, parecía completamente a merced de la tormenta eléctrica. Muchos de los pasajeros creyeron al instante que el rayo que había impactado en el avión había perjudicado a uno de los motores, pero los pilotos consiguieron controlar la situación. Finalmente, la decisión, fue ejecutar un aterrizaje de emergencia.
LEA TAMBIÉN:
Cinco muertos y casi 400 evacuados al chocar un avión comercial con una aeronave de la Guardia Costera en un aeropuerto de Tokio, Japón.
Una mujer llamada Susan solicitó el divorcio después de mirar una foto tomada con su familia y descubrir un terrible secreto.