Las mujeres temen por sus vidas, por esto, muchas se han resguardado en sus hogares después de que Talibán tomara el poder del país.
Las imágenes de afganos queriendo salir de su país son aterradoras. Los talibanes tienen ahora el poder absoluto en Afganistán, después de que las tropas americanas salieran del país. Aunque el grupo insurgente asegura que habrá una restauración de la nación, los ciudadanos temen por sus vidas, entre ellos, las mujeres, quienes ya han visto sus derechos coartados.
Las prohibiciones que tendrían las mujeres en Afganistán
En menos de una semana, los talibanes tomaron el país. Su presidente, Ashraf Ghani Ahmadzai, renunció al poder, asegurando que quería evitar derramamiento de sangre.
Después de la llegada de las bases americanas a Afganistán en el 2001, los afganos empezaron a recobrar derechos que en los años 90 fueron restringidos.
Por esto, tras la toma del poder del régimen talibán, muchos musulmanes temen volver al Afganistán de los años anteriores, entre ellas las mujeres que temen por sus derechos.
En una entrevista de la cadena de televisión BBC a Suhail Shaheen, portavoz talibán, dijo que «Las mujeres pueden tener acceso a la educación y al trabajo. Por supuesto tienen que vestir el velo (hijab)». Pero algunos testimonios y vídeos virales, desmienten lo dicho.
Los talibanes son radicales con la ley islámica y concretamente, con el rol que cumple la mujer en la sociedad, así lo determina el Sharia, donde por ejemplo, se le prohíbe a la mujer mostrar los tobillos, hacer deporte o usar cosméticos. No solo eso, su derecho a trabajar y a estudiar es vetado.
Además de usar el ‘burka’, un velo que cubre por completo su cuerpo dejando ‘al descubierto’ sus ojos a través de una malla. Si llevan las uñas pintadas, son castigadas con la amputación de sus dedos.
Tampoco pueden transitar por las calles sin el acompañamiento de un varón, que puede ser su esposo o el ‘mahram’ guardián varón con un parentesco cercano.
No pueden reírse en voz alta, ni llevar tacones porque ningún hombre puede sentir su presencia. Si la mujer debe presentarse en un juicio, su testimonio vale la mitad que la de un hombre.
El secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, expresó su preocupación sobre la situación de las mujeres en Afganistán.
«Estoy profundamente preocupado por los relatos de violaciones de derechos humanos contra las mujeres y niñas de Afganistán que temen un regreso a los días más oscuros. Buscan apoyo de la comunidad internacional. No debemos defraudarlos.»
I am deeply concerned by accounts of human rights violations against the women and girls of Afghanistan who fear a return to the darkest days.
They are looking to the international community for support.
We must not let them down.
— António Guterres (@antonioguterres) August 17, 2021
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