Niña indígena Policía
Dos hombres y tres adolescentes obligaron a una niña indígena de 11 años a consumir alcohol. Después la violaron en conjunto, y la arrojaron en un peñasco de 20 metros.
El hecho ocurrió en la zona rural de Dourados, Mato Grosso do Sul, estado del oeste brasileño fronterizo con Paraguay y Bolivia. La Policía Civil inició la investigación, encontró el cuerpo de la menor y capturó a los cinco implicados, quienes confesaron el crimen.
«Encontramos el cuerpo después de que los líderes de la aldea nos avisaran de su desaparición. Ellos nos señalaron a los adolescentes que estaban inicialmente con la niña en la aldea y que la obligaron a ingerir la bebida alcohólica y, por medio de ellos, conseguimos identificar a todos los involucrados» dijo Erasmo Cubas, comisario de la Policía Civil.
La menor pertenecía al grupo indígena Guaraní Kaiowá, uno de los pueblos más grandes de Brasil. Según lo relatan sus agresores, la niña fue obligada a consumir alcohol perdiendo la conciencia. Después, de manera colectiva fue violada y asesinada.
Uno de los detenidos e implicados, es su tío, quien confesó que llegó al lugar por los gritos de la víctima. La niña ya estaba siendo abusada por otros cuatro hombres y decidió participar en la agresión sexual, no siendo la primera vez que abusaba de ella.
Al recobrar la conciencia, la menor empezó a gritar y los amenazó con denunciarlos con los caciques de la comunidad, por lo que la lanzaron al peñasco.
La Policía afirmó que los detenidos serán acusados de homicidio doblemente calificado por feminicidio, intento de ocultar el crimen y por violación a una menor de edad.
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