En un parque de Australia se presentó un fatídico accidente, tras el ataque de una urraca a un bebé que se encontraba con su madre.
Las urracas son una especie de aves que, sobre todo los machos, defienden el nido donde se desarrollan sus crías; tanto que su manera de proteger es amenazando a quien trate de acercarse donde están las crías. Este ha sido el caso del bebé que murió tras ser atacada junto a su madre por una urraca en el sureste de Brisbane, Australia..
Bebé es atacada con su madre por una urraca y fallece
El fallecimiento del bebé se produjo tiempo después de sufrir un extraño incidente con una urraca mientras estaba acompañado de su madre.
La notificación a las autoridades se produjo alrededor de las 12:05 del domingo, después presenciar el accidente de la niña con el ave.
Los informes indican que todo ocurrió cuando la madre, que llevaba a su bebé en los brazos, se agachó para evitar que una urraca que volaba directo hacia ella impactara contra ellas y allí, la mujer tropezó.
«La mujer se había agachado para evitar una urraca y luego tropezó con el bebé en brazos. Llevamos a la niña al Hospital de Niños de Queensland en estado grave con una lesión en la cabeza. Murió más tarde en aquel lugar», indica el portavoz de los Servicios de Ambulancias de Queensland.
Testigos
Una joven pareja que presenció los hechos acudió a brindar la ayuda necesaria después de escuchar los desesperados gritos de la madre. «He visto conmoción antes, pero esto fue más allá de todo lo que había visto y oído«, manifiesta el hombre que estuvo presente durante el suceso.
La captura de la urraca se produjo gracias a dos trabajadores del Ayuntamiento de Brisbane, quienes actuaron de inmediato tras evidenciar los hechos. Tras este acontecimiento, la encerraron en una jaula para llevársela, cerraron el parque y colocaron carteles de advertencia.
Tras este acontecimiento, han sido constantes las denuncias de ataques de urracas en este lugar. Un residente manifestó haber sido víctima de uno hace ocho semanas. Mientras que otro, indica que «ha perdido la cuenta» de la cantidad de veces que ha resultado herido por una de estas aves.
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