Temas cubiertos
Aunque durante el segundo semestre del año pasado nos llegaban imágenes propias del año 2019 en China, gracias a su actuación frente a la pandemia, actualmente andan muy lejos de volver a la tan ansiada normalidad, y es que la curva de nuevos casos de Covid-19 continúa en ascenso debido a nuevos brotes que tienen como entrada los aeropuertos del país.
China arroja más de 400 nuevos casos locales desde que el pasado 20 de julio estallara un gran brote en el aeropuerto de Nankín, capital de la provincia oriental de Jiangsu, originado según las autoridades por la limpieza sin protección adecuada de un avión de Air China procedente de Rusia en el que viajaba una persona infectada.
Funcionarios de la cartera de Transporte enfatizaron esta semana en la necesidad de reforzar las medidas de prevención en los aeropuertos, con desinfecciones más exhaustivas y pruebas de ácido nucleico cada dos días para algunos trabajadores con la previsión de erradicar así los nuevos brotes que puedan surgir.
Además, las autoridades chinas de inmigración anunciaron que dejarán de expedir o renovar pasaportes para salir del país salvo casos urgentes y necesarios dada la complicada situación pandémica en el exterior y la repercusión que podría tener en el territorio.
En ciudades como Pekín, la capital de China, con más de 20 millones de habitantes, se han realizado test masivos a sus ciudadanos, procediendo a acordonar residencias y se han puesto en cuarentena a los contactos más cercanos de los contagiados. Las autoridades consideran necesario «aumentar la vigilancia, tomar estrictas precauciones y defender la ciudad sin escatimar en gastos».
Zhuzhou (provincia de Hunan), es otra de las ciudades chinas que han vuelto a las restricciones debido a los nuevos brotes. Más de un millón de personas han sido aisladas desde este lunes y durante los próximos tres días. Igualmente, se ha llevado a cabo una importante campaña de realización de test y vacunación entre los habitantes. Hasta la fecha, tras la primera gran ola, el país asiático había logrado contener con éxito los contagios locales casi a cero.
Los rebrotes dados en China son en su mayoría de la variante Delta de la Covid-19, una variante que se ha hecho mayoritaria en el mundo. La característica principal de la variante Delta es su alta capacidad de transmisión respecto a las otras cepas, gracias a mutaciones “ventajosas” que la hacen mucho más eficiente.
La OMS por su parte, afirma que el uso de la mascarilla, la higiene de manos, la ventilación y la distancia social, así como las vacunas, siguen siendo vitales para frenar la expansión de la COVID-19.
El alemán Mark Bryan tiene 61 años y usa falda con tacones para ir al trabajo, no es gay y tiene esposa, hijos y nietos.
Cinco muertos y casi 400 evacuados al chocar un avión comercial con una aeronave de la Guardia Costera en un aeropuerto de Tokio, Japón.