Saman abbas desapareció hace varios días y desde entonces se busca su cuerpo con perros y aparatos electrónicos en el que sería el campo agrícola donde vivía y trabajaba su familia. Los investigadores judiciales mantienen la hipótesis de que la joven fue asesinada por su propia familia.
Saman, tras irse a vivir a Italia, empezó a vivir su vida de acuerdo con las costumbres del nuevo país, negándose a aceptar un matrimonio impuesto con su primo y bajo obligación de sus padres.
No es la primera vez que una familia islámica aplica la pena de muerte a alguien que se niegue a aceptar las imposiciones, pero el caso de Saman Abbas ha conmocionado a la sociedad de Italia al tener evidencia del terrible homicidio en la familia.
Todo ocurrió en la región de Emilia Romana, en el centro de Italia, donde desde hace 15 años el padre de Saman, Shabbar, de 43 años, trabajaba. La casa de la familia está junto a una empresa agrícola en la que trabajan, en su mayoría, extranjeros.
Saman llegó muy pequeña a Italia, con una familia que la obligaba a vestir de negro y estar cubierta de pies a cabeza. Tampoco le permitieron entrar a la escuela. Saman decidió entonces hablar con sus vecinos y pedir ayuda. A sus 17 años y después de varias peleas con su padre y madre, decidieron devolverla a Paquistán. Ella denunció lo que estaba ocurriendo al servicio social del municipio y desde ahí la enviaron a una casa protegida.
Al cumplir 18 años, ella volvió a su casa para conseguir sus documentos y poder irse, pero no le fue posible.
Tras sentir la ausencia de Saman, las personas del municipio denunciaron a las autoridades su desaparición. La policía local llegó a la casa y la encontró vacía. Al parecer, los padres había regresado de improvisto a Paquistán y no había rastro de la joven.
Gracias a una cámara externa de la empresa agrícola lograron descubrir qué sucedió. Las imágenes captaban a tres personas, uno de ellos era un tío, que se dirigían a la parte de trasera de la casa con palas. Tres horas después, se ve la vuelta de los familiares.
En otras imágenes se ve a Saman saliendo acompañada de sus padres un día antes, pero el regreso es de ellos dos sin la joven. Poco después, huyeron a Paquistán. El hermano menor de Saman se encuentra también en una comunidad protegida y se han convocado a los magistrados que se haga más investigación sobre el caso.
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