El domingo 23 de mayo, en la región de Piamonte, al norte de Italia, ocurrió un grave accidente de teleférico en el que perdieron la vida 14 personas. Entre las víctimas se encuentran niños y el único superviviente ha sido un niño que se encuentran en el hospital gravemente herido.
El aforo del teleférico estaba reducido de 40 personas a 15 por las restricciones COVID.
A 100 metros del último pilar y a 300 de llegar a su destino, el cable del teleférico se rompió, precipitando a este a 10 segundos de caída libre hasta que chocó con los árboles.
Después la cabina rodó ladera abajo unos 50 metros. Cuando el cable se rompió, los frenos de emergencia se deberían haber activado, pero no fue así.
Homicidio múltiple, eliminación de herramientas para evitar accidentes laborales y lesiones por negligencia es a lo que se enfrentan los tres detenidos por el incidente del teleférico.
Luigi Nerini, propietario de «Ferrovie del Mottarone», empresa que gestiona el teleférico, su director y el jefe de operaciones del teleférico han sido detenidos tras el interrogatorio por su conocimiento de la manipulación de los frenos de emergencia. Así lo ha afirmado Olimpia Bossi, la fiscal jefe de Verbania que lleva la investigación. Al parecer, el sistema de frenos había sido manipulado con una horquilla. Este sistema de emergencia daba problemas provocando frenazos y paradas del teleférico. Como su arreglo requería un parón se decidió no intervenir. El teleférico había sufrido ya un parón en 2014 por mantenimiento más el parón debido a la pandemia.
Este chico de 5 años está despertando del coma, aunque los médicos aún ven grave su estado de salud. Aunque tenga una evolución positiva y se le pueda extubar hoy, es una situación crítica debido al politraumatismo. Eitan ha perdido a su hermano, a sus padres y a dos de sus bisabuelos en el accidente.
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