La historia de una mujer afgana condenada a 40 latigazos
La historia trata de una mujer condenada a 40 latigazos por el hecho de hablar por teléfono con un hombre. Este sería el «delito» cometido por la mujer afgana.
Su único delito fue hablar por teléfono con un hombre.
Así que, por eso una mujer afgana ha sido condenada a un total de cuarenta latigazos. Un castigo que ha sido aplicado en medio de la vía pública.
Grabaciones desde un móvil que evidencia el hecho de manera contundente. Difusión de videos que dejan ver que el pasado 12 de abril en las redes sociales se hizo viral una serie de imágenes.
Aunque al parecer el hecho ocurrió a finales del año pasado.
Durante 80 segundos, que para la víctima resultaron ser eternos, una mujer es golpeada con un látigo. Mientras las únicas palabras que puede pronunciar son «me arrepiento, es mi culpa, me equivoqué».
Las grabaciones evidencian cómo la mujer estaba ubicada de rodillas en el suelo y tapada con un burka. Mientras que un hombre con barba blanca la azota en primera instancia. Además, se le unen otros tres hombres, autoproclamados jueces. Hechos que han sucedido a pocos kilómetros de la ciudad afgana de Herat.
Al parecer la afgana ha sido castigada por el hecho de hablar por teléfono con un nombre, hecho por la que acusan a la mujer de tener relaciones inmorales.
Sin duda, el vídeo ha causando una gran indignación en la comunidad internacional. Donde juzgan de manera directa el acto que ha tenido las autoridades frente a la mujer. Un acto que catalogan como «inapropiado» y que en muchos países funciona como una violación de los derechos humanos. Pues la señora fue juzgada, acusada y torturada por un acontecimiento que en los países internacionales no tiene condena ni prejuicio.
Por esta razón, las redes sociales han reventado el apoyo para la mujer, demostrando los artículos que ella debe reclamar y que no debe debe dejar que la justicia pase por encima de ella. Aunque los tribunales populares que son considerados un sistema existente en Afganistán, al parecer están oficialmente prohibidos en la región.
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