Todo se descubrió por una prueba de ADN en la que fueron sometidas ambas.
La historia se trata de dos gemelas que fueron separadas al nacer hace 36 años en Corea del Sur. Y quienes fueron adoptada por diferentes familias en EE.UU.
Gemelas separadas nacidas en Corea del Sur
Son dos gemelas que fueron separadas en su nacimiento en Corea del Sur y quienes fueron adoptadas por dos familias estadounidenses diferentes.
Ambas se reunieron hace poco, por primera vez después de 36 años, el día de su cumpleaños.
Se trata de Molly Sinert y Emily Bushnell, la primera fue adoptada por una familia judía y creció en Florida. La segunda, adoptada por otra familia judía y quien ahora reside en Pensilvania.
Lo curioso del caso es que ninguna tenía conocimiento de la otra, no sabían que tenían una hermana y mucho menos que eran idénticas. Incluso, las mujeres no tenían conocimiento de sus orígenes. Hasta que, la hija de 11 años de Bushnell, realizó un análisis de ADN para conocer la genética y los antecedentes de su madre.
«Quería hacer la prueba de ADN porque mi madre era adoptada», así explicó la niña el porqué de su idea.
Aunque su madre no quería someterse a la prueba, permitió que su hija se la hiciera. Así fue como Sinert también decidió realizarse un análisis de ADN el cual recibió resultados el pasado marzo, mismo tiempo que su hermana gemela.
En ese instante, se dieron cuenta que tenían un pariente muy cercano ya que en los resultados salía que «compartía el 49,96% del ADN con otra persona». En un inicio el examen arrojaba que ese resultado se debía a que tenía una hija. Respuesta que obviamente Sinert descartó porque nunca ha dado a luz. Así fue como, en poco tiempo se dieron cuenta que eran gemelas.
«Inmediatamente se llenó un vacío en mi corazón… aunque tengo una familia que me quiere y me adora y que ha sido absolutamente maravillosa. Siempre hubo un sentimiento de desconexión. Describir que tenía una gemela idéntica lo aclaró todo. Todo tiene sentido», agregó.
Primer encuentro
Después de 36 años se encontraron por primera vez en Florida el pasado 29 de marzo, mismo día en que cumplían sus 36 años. Por parte de Bushnell, considera que ha sido el momento más feliz de su vida.
«Me han robado los últimos 36 años de una vida que podría haber tenido con mi gemela. Pero, al mismo tiempo, estoy muy agradecida y emocionada por lo que me espera», confesó.
Por último, ambas han confirmado su deseo de regresar a Corea del Sur en un futuro.
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