Las declaraciones de Mario Draghi hacia el presidente Erdogan, han complicado las relaciones económicas que existían entre Turquía e Italia.
La crisis diplomática entre Italia y Turquía va en aumento, después de que el primer ministro italiano, Mario Draghi, acusará al presidente turco Erdogan de «dictador». Algo que no ha sentado nada bien en el país, donde han empezado a suspender contratos con empresas italianas.
Draghi: Italia y tuquía enfrentadas
Por el momento, uno de los contratos suspendidos es de la venta de helicópteros de Leonardo, un importante grupo industrial italiano especializado en el sector aeroespacial, controlado por el Estado.
Los intereses comerciales que Turquía mantiene con Italia se cifran en; 18.000 millones de euros Italia.
Tienen cerca de 1.500 empresas en ese país, siendo su segundo socio económico europeo.
Todo comenzó cuando el pasado jueves, se le preguntó a Draghi por su opinión acerca de la humillación que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, sufrió junto al presidente del Consejo Europeo, el belga Charles Michel, mientras visitabaln Ankara.
El suceso consistió en que el presidente Erdogán dejó sin silla a von der Leyen, la cual acabó sentándose en un sofá, sin que el presidente Michel hiciera nada al respecto.
La respuesta del primer ministro italiano fue la siguiente:
«No estoy absolutamente de acuerdo con el comportamiento de Erdogan hacia la presidenta de la Comisión Europea von der Leyen. Creo que no fue apropiado. Lamenté mucho la humillación que tuvo que sufrir von der Leyen. La consideración que se debe hacer con estos, llamémosles por lo que son, dictadores con los que, sin embargo, tienes necesidad de colaborar, o más bien cooperar, es que uno ha de ser franco al expresar la diferencia de puntos de vista, comportamientos, visiones, pero dispuesto a cooperar por los intereses del propio país. Es necesario encontrar un equilibrio justo».
«Existe una Europa de democracia y otra de regímenes autoritarios con los que no hay que colaborar sino cooperar».
No ha habido disculpa
A partir de esas declaraciones el embajador de Italia, Massimo Gaiani, fue convocado por parte del Gobierno de Turquía para pedirle una explicación y las correspondientes disculpas de manera oficial. Sin embargo, estas no se han producido por ello Ankara ha comenzado a actuar en consecuencia, perjudicando las relaciones económicas que existen entre ambos países.
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