España podría colocarse en los próximos días como el país con mayor número de contagios contabilizados de coronavirus de Europa.
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El Covid-19 llegó en el 2020 y cogió a todo el mundo desprevenido. Esa primera ola fue una de las mas aterradoras y, dejó en su paso, una gran enseñanza para los gobiernos que se tendrían que preparar para una segunda ola después del verano.
Sin embargo, actualmente, toda Europa se está enfrentando a una tercera ola que viene muy dura, de la mano de un invierno helado, justo después de las fiestas navideñas. Por lo tanto, varios países europeos, como Alemania, Italia, Portugal o el Reino Unido, han optado por endurecer sus medidas de contención contra el covid-19, en un intento desesperado de contener la tercera ola, que presenta picos de contagios y muertes iguales o peores que los de la primera ola.
Con la tercera ola del Covid-19 azotando a Europa en pleno invierno, los gobiernos europeos han decidido endurecer las medidas restrictivas en contra del Covid-19. Con la cepa británica, la cuál se ha establecido que es más contagiosa, las medidas de confinamiento están siendo más estrictas y prolongadas. Teniendo esto en cuenta, aquí le contamos las medidas adoptadas por ciertos países europeos.
El país de Angela Merkel es uno de los países que está atravesando una de las terceras olas de Covid-19 más duras. Aunque fue uno de los países que mejor manejó la primera ola, ahora, se encuentran en una de las terceras olas más duras a nivel Europa. De hecho, las nuevas cifras han marcado nuevos récords, tanto en casos como en fallecidos, lo que ha llevado al Gobierno a plantear un posible confinamiento hasta los primeros días de abril. En las palabras de Merkel: «Si no conseguimos parar la variante británica del virus, entonces multiplicaremos por 10 el número de casos para Semana Santa. Necesitamos aún entre ocho o diez semanas más de medidas estrictas«.
Con este pronóstico Merkel recibe el nuevo año, aunque hay que tener en cuenta que Alemania fue uno de los países que implementó medidas muy duras para las fiestas navideñas. Algo que si es cierto es que los colegios seguirán cerrados hasta final de mes, así como también los establecimientos de ocio, restaurantes y bares. Hasta el momento, las cifras de vacunación establecen que, de un total de 83 millones de habitantes, tan solo 688.782 personas han sido vacunadas.
Italia es otro de los países que se enfrenta a una temporada de frío e intenta dar frente a los contagios, ampliando el estado de emergencia hasta el 30 de abril. Desde diciembre del año pasado, el país ha estado implementando restricciones cada vez más duras, como cerrar establecimientos comerciales, exceptuando farmacias y supermercados. Sin embargo, las cifras siguen siendo malas, tanto así, que el Gobierno de Conte ha decidido ampliar el estado de emergencia, con el ministro de Sanidad, Roberto Speranza, explicando que «el virus ha vuelto a circular peligrosamente».
De hecho, Speranza anunció ante el Parlamento como serán las nuevas medidas de contención que se tomarán y que entrarán en vigor a partir del próximo 16 de enero. Además, hablo de la situación grave que atraviesa el país, ya que el indice de contagio esta al 1,03 y cuentan con una incidencia de más de 313 casos por cada 100.000 habitantes. El ministro de Sanidad italiano recuerda que «estamos en el último kilómetro de esta batalla, necesitamos una colaboración leal, un esfuerzo unido para combatir el virus: los próximos meses serán difíciles».
Aunque inicialmente el Gobierno portugués estaba contemplando mantener el confinamiento durante quince días, en vista del avance de la tercera ola, ha decidido encender todas las alarmas y va a mantener el confinamiento estricto al menos durante un mes más. Estas medidas implican el cierre comercial de la mayoría de establecimientos que prestan servicios de ocio y restauración, donde solo se podrá operar para llevar o hacer uso del servicio a domicilio.
En cuanto al manejo que se le dará a las escuelas, y si se mantendrán abiertas o no, Costa asegura que los expertos coinciden en que todos los menores de 12 años deben asistir a clases presenciales. Sin embargo, aún no está claro cuál será el mejor panorama para los alumnos mayores, por lo tanto aún se está evaluando qué se va a hacer con los cursos más altos.
La tercera ola en el Reino Unido no ha podido ser frenada, incluso con todo el país aún en cuarentena. De hecho, este martes, 12 de enero del 2021, confirmaron la muerte de 1.243 personas por Covid-19, un dato que se convirtió en la segunda cifra más alta de toda la pandemia en el país. Si la población no cumple con las medidas sanitarias establecidas por el Gobierno, Boris Johnson, ha amenazado con reforzar aún mas la cuarentena impuesta en el país. La situación es tal, que las autoridades se han visto en la necesidad de reabrir los hospitales de emergencia que se construyeron al inicio de la pandemia, cuando apenas se estaban enfrentando a la primera ola de coronavirus.
Hasta el momento, el país ve como su única opción para contener el virus, la vacuna que han comenzado a aplicar incluso dos semanas antes que la misma Unión Europea. Además, solamente las personas que tengan una PCR negativa podrán entrar al país y, por ahora, el confinamiento se extenderá hasta el 31 de marzo, con una posibilidad de ampliarlo hasta finales de abril.
El Gobierno de Macron, con Jean Castex a la cabeza, también ha expresado su preocupación ante la inminente tercera ola. Hasta el momento, el país ha superado el umbral de las 100.000 vacunaciones, cifra que se espera aumentar en los próximos días, donde el Gobierno tiene la meta de lograr las 400.000 personas estén vacunadas al final de la semana. Sin embargo, aún consideran la posibilidad de cerrar los colegios durante unas semanas para lograr contener la ola, la cuál tiene su punto principal en Marsella.
Por miedo a la cepa británica, el Gobierno de Rutte también ha tomado medidas drásticas. Hasta el momento, estas nuevas medidas incluyen el confinamiento hasta el 9 de febrero, donde se mantienen cerradas todas las actividades no esenciales y los colegios. Aunque Rutte preveía relajar las medidas este 19 de enero, él mismo anunció que «no nos queda más remedio que extender el confinamiento otras tres semanas más, hasta el martes 9 de febrero». Además, recuerdan la importancia del distanciamiento social y esperan, de una vez por todas, lograr controlar y contener la tercera ola del coronavirus.
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