La semana pasada el mundo pareció volver a entrar en crisis cuando, desde el Reino Unido, comunicaron la existencia y propagación de una nueva cepa, una variación, del Covid-19 que se presumía era más contagiosa. De esa manera, muchos países cerraron sus fronteras con Gran Bretaña.
Sin embargo, comenzaron a detectar que esta variación ya estaba presente dentro de sus regiones. Ese fue el caso en Italia, que después de detectar el primer caso en una pareja que acababa de llegar al país, ahora han encontrado un segundo caso en una persona, que en este caso, no ha tenido ninguna conexión con el Reino Unido.
Esta semana se ha detectado el segundo caso de la nueva cepa británica del Covid-19 en una persona que reside en el centro de Italia, Loreto, Ancona. Su particularidad es que el contagiado no ha tenido contacto con personas procedentes del Reino Unido. Hasta el momento, los medios de comunicación han informado que las fuentes médicas explican que, cuando la persona se sometió a la prueba molecular para detectar el Covid-19, porque presentaba ciertos síntomas, descubrieron que se trataba de la nueva variación del virus. El director del Laboratorio de Ancona, Stefano Menzo, informó que «ahora sabemos que es la variante inglesa».
Este no es el primer caso. El pasado 20 de diciembre, una persona que estaba contagiada con la misma variación británica había sido puesta en aislamiento junto a su pareja, según informó el Ministerio de Sanidad. En este caso, la pareja llegaba del Reino Unido, aterrizando en el aeropuerto romano de Fiumicino, e inmediatamente fueron puestos en aislamiento preventivo tras haber confirmado que tenían la nueva variación del virus.
El 14 de diciembre, el ministro de Sanidad, Matt Hancock, anunciaba ante la Cámara de los Comunes la existencia de la nueva variante dentro del genoma del virus que ha caracterizado este 2020. Aunque en su momento generó pánico a nivel mundial, ahora los expertos aseguran que al parecer esta cepa es «más contagiosa» pero no más peligrosa. Sin embargo, el anuncio de esta nueva variación llevó a que varios países, entre esos Italia, cerrara fronteras con el Reino Unido.
Por lo tanto, Italia suspendió todos los vuelos desde el Reino Unido el pasado domingo. Sin embargo, hoy, miércoles 23 de diciembre, el ministro de Exteriores, Luigi Di Maio, ha autorizado el regreso de los residentes italianos en el Reino Unido. Esto solo se permitirá si se hacen una prueba PCR 72 horas antes del viaje y guardan cuarentena una vez lleguen.
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