El primer caso registrado a nivel mundial en el que la justicia británica señala al aire contaminado como causa de una muerte, ocurre en Reino Unido tras el fallecimiento de una menor de 9 años.
La justicia británica, encargada de dictaminar que la muerte de una menor de nueve años se causó por el aire contaminado de la zona donde la niña residía.
Ella Kissi Debrah, una niña de solo nueve años que vivía cerca de una carretera principal.
El caso de la menor fallecida se considera como el primero en el mundo en señalar a la contaminación como principal causante del fallecimiento.
La investigación inició cuando se dieron cuenta que el aire de la zona en la que vivía la menor superaba los límites legales de la UE. Los parámetros establecidos son desde la directriz de la Organización Mundial de la Salud.
La madre de la menor tuvo que testificar ante la justicia británica durante la investigación en proceso. Además, la responsable de la menor, declaró que su hija había sido trasladada al hospital tras sufrir varios ataques de asma y algunas convulsiones que presentaba la menor.
En el certificado de defunción se estipula que la niña de nueve años falleció debido a una falla en su sistema respiratorio, asma severa y por la exposición a la que estaba la menor a la contaminación del aire en el territorio.
«Su valiente campaña ha dado un hermoso rostro humano a la devastación que la contaminación climática causa en millones de vidas a nivel mundial. Ningún personaje político de la ciudad puede negar su conocimiento ante el aire contaminado que se evidencia día a día», informó María Neira.
De acuerdo a las declaraciones y a las investigaciones obtenidas, la directora de medio ambiente, cambio climático y salud de la OMS, reconoció que es un caso de extraña procedencia y único en el mundo. El cual señala al medio ambiente como culpable de la muerte de la niña.
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