Putin anuncia que la vacuna Sputnik-V contra la COVID será obligatoria para toda la población rusa. La vacunación masiva se inicia la semana próxima.
Putin anuncia que la vacuna Sputnik-V contra la Covid-19 será obligatoria para toda la población rusa.
Putin y la vacuna Sputnik-V obligatoria
Tal y como ha anunciado esta tarde el presidente ruso Vladimir Putin, la vacuna Sputnik-V va a ser obligatoria para toda la población rusa.
La vacunación masiva contra la Covid-19 comenzará a llevarse a cabo la semana que viene. En una videoconferencia el mandatario declaraba que va a pedir organización en el trabajo «para que a finales de la semana que viene comencemos la vacunación a gran escala» ya que «la industria y las infraestructuras están listas».
Para ello cuenta con la vice primera ministra encargada de Salud, Tatiana Golikova.
Fue el pasado martes cuando Rusia anunciaba que la vacuna desarrollada por el centro de investigación Gamaleya de Moscú, cuenta con una eficacia inmune del 95%. Además, su precio estimado está por debajo de los 10 dólares la dosis. Según han comunicado desde el centro Gamaleya, estos resultados preliminares se han obtenido 42 días después de vacunar con una primera dosis a un grupo de voluntarios. Tanto el centro como el Fondo de Inversiones Directas de Rusia (FIDR), han asegurado que no se han detectado reacciones adversas «imprevistas» entre estos voluntarios.
Algunas contradicciones
Según había afirmado Putin, la vacuna iba a ser voluntaria y gratuita. No obstante, según informaciones más recientes, la vacunación en Rusia será obligatoria para toda la población. Serán médicos y profesores los primeros en vacunarse contra la Covid-19 con la Sputnik-V de la cual ya se han creado 2 millones de dosis. La orden de iniciar la vacunación masiva se dio el mismo día en que el país registró un nuevo máximo diario de muertes por coronavirus.
Otra contradicción que nos ha sobrevenido estos días, aunque no relacionada con Putin directamente, es la decisión de la Unión Europea de no comprar la vacuna rusa Sputnik-V. Una decisión que no se comprende del todo, ya que la vacuna forma parte de un tipo de vacunas bien estudiado. Según ha indicado el cirujano e infectólogo Dimitris Gakis, la decisión es inaceptable pues se trata de «una acción sin sentido que, entre otras cosas, provoca sospechas de los opositores a la misma inoculación».