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Dos estados pueden ser decisivos para definir la contienda electoral, Trump y Biden necesitarán de Pennsylvania y Florida para ganar las elecciones.
A pesar de no ser los estados con mayor cantidad de votos electorales, puesto que Florida cuenta con 29 y Pennsylvania con tan solo 20, sin el apoyo de estos dos estados estaría imposibilitado de continuar en la casa blanca.
Biden podría ganar las elecciones aún sin estos estados, pero sería por un margen mínimo y en esta contienda no puede descuidarse.
Trump, quien ha aparecido como perdedor en las últimas encuestas, necesitará repetir los estados republicanos con los que ganó en las elecciones de 2016 y además anexar aquellos cuyos votos aún no estén completamente claros.
El estado donde se firmó la declaración de independencia en 1776 cuenta con cerca de 13 millones de habitantes. Es un estado que no ha tenido una filiación política declarada, a diferencia de los estados del sur, y cuenta con la particularidad de haber sido uno de los estados sorpresa en la victoria de Trump en 2016. Desde 1988 no ganaba un candidato republicano en Pennsylvania, pero Trump logró romper la racha.
Según varios reportes, el partido republicano ha tenido una fuerte campaña puerta a puerta en el estado. Sin temor a la COVID19 el partido ha ido movilizando a los votantes blancos y rurales que no votaron en 2016, algo cercano a unos dos millones cuatrocientos mil votantes.
Biden es oriundo del estado y no puede permitirse el perderlo, ha visitado más de 12 veces el estado y gastado más de 20 millones de dólares en anuncios televisivos. Su política ha hablado bastante de Scranton, su ciudad natal, y de como Trump no representa los mismos intereses de los habitantes del estado y la ciudad. Un triunfo en este estado significaría, según fivethirtyeight, 96 por 100 posibilidades de ser presidente y si pierde se reduciría a 84.
El estado del voto latino, Florida, es de los más disputados y analizados en cuanto a elecciones. Con sus 29 votos representa un gran empujón hacia la victoria de cualquier candidato. En últimos sondeos Biden ha ganado por un pequeño margen en este estado (51-47), a pesar que este fue uno de los estados que le dio el apoyo final a Trump en la campaña del 2016.
Para Trump este estado presenta un verdadero reto, la mayoría de los votantes son latinos, negros y seniors; poblaciones con las que el actual presidente ha tenido más de una controversia. La estrategia por parte de Trump ha sido sencilla: asustar a los votantes con que Biden significa socialismo. La comparación con países latinoamericanos que han sido destruidos por gobiernos de izquierda es el arma principal de Trump para convencer a los votantes de elegirlo a él.
Biden, por otra parte, ha ganado popularidad en el estado gracias a los errores del presidente Trump. Hay varios ejemplos de esto, la desatención del presidente a la emergencia en Puerto Rico, sus opiniones fuertes contra los migrantes latinos, la falta de aprobación al movimiento black lives matter y el mal manejo que ha tenido Trump en la pandemia del COVID19.
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