Francia cierra una mezquita en París tras el trágico incidente, la decapitación del maestro de historia Samuel Paty.
El Ministro del Interior, ordenó el martes 20 de octubre el cierre temporal de una mezquita en las afueras de París.
Esta medida se ha llevado a cabo como parte de una ofensiva contra los musulmanes que incitan al odio tras la decapitación de un maestro que mostró a su clase caricaturas del profeta Mahoma.
La Gran Mezquita de Pantin, un edificio a las afueras del noreste de la capital, había compartido un vídeo en su página de Facebook antes del ataque.
En este, se descargaba odio contra el profesor de historia Samuel Paty.
La orden de cierre de seis meses tiene «el único propósito de prevenir actos de terrorismo«, afirmaba el aviso emitido por el jefe del departamento de Seine- Saint- Denis.
La decapitación a manos de un presunto islamista por el uso de la sátira religiosa es desconcertante. La finalidad del prosefor era explorar con los estudiantes el debate en torno a la libertad de expresión. Principio profundamente apreciado de la democracia en Francia. Este acto ha convulsionado al país y conmocionado al mundo.
El presidente Emmanuel Macron, está cada vez más preocupado por lo que llama separatismo islamista. Lo define como: «el intento de elementos hostiles dentro de la gran comunidad musulmana de Francia de imponer creencias islámicas conservadoras sobre los valores tradicionales de la República francesa».
El rector de la Gran Mezquita, M´hammed Henniche, lamentó este pasado finde, 16 de octubre, haber compartido el vídeo en las redes. Después de saber que el caso de Paty se había convertido en una víctima como campaña de intimidación.
En el vídeo, el padre musulmán de uno de los estudiantes de Paty comentó que el profesor de historia había señalado a los alumnos musulmanes. Asimismo aseguraba que les había pedido que dejaran su clase antes de mostrar caricaturas. Declaración invalidada, pues era completamente falsa.
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