España podría colocarse en los próximos días como el país con mayor número de contagios contabilizados de coronavirus de Europa, superando Luxemburgo.
Según el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC), España ha pasado de ser el quinto país con más contagios contabilizados de COVID-19 al segundo en solo dos semanas. Los datos del centro confirman que actualmente hay 115,7 casos por cada 100.000 habitantes.
El aumento de los rebrotes de coronavirus en España ha llevado que muchos países de Europa aumenten las restricciones hacia los viajeros originarios de España e incluyan las cuarentenas obligatorias a estos pasajeros en sus planes de contención del virus.
España está en camino de ser el país con más contagios contabilizados de COVID-19 de Europa. Siguiendo la tendencia de contagios de los últimos días, España podría reemplazar esta semana a Luxemburgo, cuyo radio es de 121,2 contagiados por 100.00 habitantes.
Los países europeos aumentan las restricciones a los viajeros que procedan de España y aumenta el número de estados que piden cuarentena obligatoria. Bruselas ha pedido que Europa limite las restricciones a las regiones más afectadas por el coronavirus y que intenten no aplicar todas las medidas a todos los territorios del país. La Comisión ha rogado a las capitales que tomen medidas proporcionales y estas sean comunicadas, por adelantado, al país.
Los eurodiputados españoles, a favor de la Comisión
La eurodiputada del PSOE, Inmaculada Rodríguez Piñero apoya fielmente la iniciativa de la Comisión. Según ha explicado al diario El País que “estamos viendo que se están tomando decisiones, sobre todo, por parte de Reino Unido, que si miras las estadísticas no se sostienen. Me parece que la carta es razonable: las decisiones deben estar respaldadas por evidencias científicas. Y coincido en que la ratio más significativa debe der la de positivos por test realizados, por lo que se debe garantizar que haya suficientes test para todos”.
Por su parte, José Ramón Bauzá, homólogo de Ciudadanos y expresidente de las Baleares, opina que el cierre de fronteras unilaterales puede aumentar la llama euroescéptica. “Uno de los principales errores de la primera ola fue el cierre de fronteras internas. No solo es absurdo a efectos epidemiológicos, sino que además mata poco a poco a la UE”.
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