España esperará por el principio de reciprocidad para reabrir sus fronteras con China, Marruecos y Argelia a partir de este 4 de julio.
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España mantendrá sus fronteras cerradas a Marruecos, Argelia y China y será el principio de reciprocidad lo que cambie esta decisión. Esto se debe a que estos países vetaron a los españoles al iniciarse la pandemia del Coronavirus. De esta manera, solo podrán ingresar viajeros de 12 de los 15 países que la Unión Europea (UE) determinó como seguros por su situación epidemiológica.
Movilidad en las fronteras de España
El Ministerio del Interior así lo ha informado, por lo que el listado de los estados fuera del espacio de libre circulación Schengen que sí podrán acceder a territorio español queda conformado por Uruguay, Canadá, Australia, Japón, Montenegro, Georgia, Ruanda, Nueva Zelanda, Serbia, Corea del Sur, Tailandia y Túnez.
El Boletín Oficial del Estado (BOE) publicado por Interior, también deja claro que esta determinación puede ser modificada ante cualquier cambio de circunstancias o nuevas recomendaciones dentro de la UE. Además, éste informa que no es necesaria la nacionalidad de las personas de esta docena de países para ingresar, basta con tener residencia en ellos.
Reapertura de fronteras condicionada
El Gobierno de España ha indicado que el criterio de reciprocidad con Argelia y Marruecos se enmarca en la necesaria coordinación en las fronteras con países con los que comparte un elevado flujo tanto de entrada como de salida.
Respecto a China, el Consejo de la UE ya había recomendado supeditar la apertura de las fronteras siempre y cuando exista el régimen de reciprocidad, por lo que la decisión final queda en el tejado del país asiático.
Solo cuatro de las 15 naciones citadas que no son miembros de la UE permiten entrada en estos momentos a viajeros españoles. Ellas son Serbia, Montenegro, Corea del Sur y Túnez.
Excepciones considerables
Estudiantes que realicen estudios en los estados miembros de UE que cuenten con el permiso o visado necesario, no tendrán problemas para ingresar a ellos. Lo mismo ocurre con los trabajadores altamente cualificados y cuya labor o trabajo no se pueda realizar a distancia.
