Así es Ángeles Béjar, la madre del presidente sancionado de la Real Federación Española de Futbol (RFEF), Luis Rubiales, que hace huelga por su hijo.
Así es Ángeles Béjar, la madre de Luis Rubiales, que comienza huelga de hambre por su hijo, en la iglesia Divina Pastora de Motril.
Luis Rubiales, nombre que resuena constantemente en la actualidad nacional, ha superado los límites del mundo deportivo para inmiscuirse en un drama familiar.
La reciente suspensión de la FIFA a Rubiales por el beso a la futbolista Jenni Hermoso ha causado gran revuelo.
Sin embargo, es ahora su madre, Ángeles Béjar, quien adquiere protagonismo en un episodio que pocos esperaban.
Desde siempre, Rubiales se ha identificado como una persona con fuertes lazos familiares.
Una muestra de ello fue la reciente asamblea extraordinaria de la RFEF, en la que aseguró no renunciar a su puesto.
Durante el evento, sus hijas y su padre se convirtieron en personajes centrales, destacando un emotivo momento en que interrumpió su discurso para consolar a una de sus hijas visiblemente afectada.
¿Quién es Ángeles Béjar?
Ángeles Béjar es una peluquera en Motril (Granada), madre de Luis Rubiales, presidente suspendido de la Real Federación española de Futbol (RFEF).
Ha tenido que enfrentar recientemente el vandalismo en su hogar.
También ha expresado su profundo dolor y frustración por lo que considera una «cacería inhumana y sangrienta» en contra de su hijo
El 28 de agosto, Ángeles, junto a su hermana, han decidido encerrarse en la iglesia Divina Pastora de Motril, iniciando una huelga de hambre.
Con ello, pretenden respaldar la versión de su hijo, sosteniendo que el beso a Hermoso fue consensuado. Adicionalmente acusan a la futbolista de falsear la realidad.
Su protesta en la iglesia, afirma, será «indefinida, día y noche», hasta que se haga justicia.
El núcleo Rubiales
Más allá de la actual situación con Ángeles, la familia siempre ha sido un pilar fundamental para Luis Rubiales.
Su padre, Luis Manuel Rubiales López, tuvo una aceptable carrera política, marcada por tropiezos, y su tío, Juan Rubiales, aunque comenzó como aliado dentro de la RFEF, terminó distanciándose en circunstancias aún por esclarecer.
Esta saga familiar, ahora más que nunca, se encuentra bajo el reflector público, desvelando poco a poco los matices de su vida privada.
