La televisiva Pilar Rubio ha acudido como protagonista al podcast de Laura Escanes para explicar cómo es la educación de sus hijos.
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Pilar Rubio desvela lo que hace con sus hijos: “Si quieren dinero tendrán que trabajar”. La presentadora ha explicado cómo es la educación de sus hijos. Afirma que no recibirán caprichos hasta que encuentren un trabajo.
Pilar Rubio desvela lo que hace con sus hijos
La televisiva Pilar Rubio ha acudido como protagonista al podcast de Laura Escanes, Entre el cielo y las nubes. Allí ha aprovechado su presencia para hablar de las personas más importantes de su vida. Estas son sus cuatro hijos, Sergio, Marcos, Alejandro y Máximo Adriano.
La mujer de Sergio Ramos admite que sus hijos son conscientes de la fama que tienen sus padres, ya que “no han podido vivir otra cosa” desde que llegaron a la vida. “Son niños que van al colegio, aunque no juegan mucho al fútbol”, explica. De hecho, la colaboradora de El Hormiguero ha compartido una anécdota acerca de uno de sus hijos y que tiene que ver con un regalo que le pidió a su madre. “Mi hijo viene a veces y me dice: ‘Es que quiero un móvil, yo quiero uno porque no sé quién tiene uno’”.
‘Pero tú dónde vas, chaval’
Así demuestra la buena educación que están recibiendo sus hijos aunque es mucho todo lo que les rodea por el trabajo de sus padres. “Yo le digo: ‘Pero tú dónde vas, chaval’. Yo me compré un móvil para trabajar cuando no tenía dinero. Les digo que cuando tengan dinero que se lo compren, pero hasta los 16 no los tendrá”, explica. “Su padre es un trabajador nato y su madre igual. Yo no les doy paga ni nada, son niños pequeños. Si quieren dinero, pues les digo: ‘Tendrás que trabajar’”.
“Valorar las cosas”
Además, la modelo insiste en que sus hijos deben “valorar las cosas” que reciban a lo largo de su vida porque sus padres provienen de familias “súper normales” y sin ningún tipo de lujo. “De pequeña, mi padre me ponía a limpiar los cristales de la tienda que teníamos. Lo único que hemos hecho ha sido currar”, reitera. Pilar también cuenta que no les permite a sus hijos que se dejen comida en el plato, aunque ese logro sea a veces complicado. “No tengo mucha paciencia”. “Son niños que van al colegio, aunque no juegan mucho al fútbol”, explicó finalmente sobre sus hijos.
