Kiko Rivera se ha sincerado en su última entrevista para la revista 'Lecturas', en la habla de la delicada situación de salud que le tocó vivir.
En una reciente entrevista, Kiko Rivera ha confesado el problema de salud que vivió y por el cual casi llega a morir. Todo ello en mitad de una guerra con su madre, en la que estaban negociando la posible venta de Cantora.
La salud de Kiko Rivera
En la entrevista exclusiva, Kiko dio varios titulares en los que dejó patente que la relación con su madre iba bien encaminada tras casi un año y medio distanciados. Pero sorprendió al relatar el problema de salud que tuvo y del cual nunca se filtró nada a los medios.
«Me intervine para quitarme la banda gástrica y hacerme una reducción de estómago«, cuenta en la revista. Al parecer él mismo tomó la decisión de no contar nada sus seguidores mediante sus redes sociales ya que tenía que pasar por el quirófano sin ofrecer más detalles.
El Dj se sincera y relata cómo tuvo suerte de que haberse realizado la operación , ya que sin ella podría haberle derivado en otros problemas y su vida se podría haber complicado.
«Me dijeron que estaba engordando, y el aparato se iba comiendo el estómago. Ya había partido dos capas. Me intervine para quitarme la banda gástrica y hacerme una reducción de estómago. Se complicó y no se pudo hacer. Si la tercera capa se hubiera roto, se hubiera creado una peritonitis y podía haber muerto».
Isabel Pantoja desconocía el estado de salud de Kiko Rivera
Kiko cuenta que en aquel momento le sorprendió que su madre no se pusiera en contacto con él: «No me llamó nadie, ni mi madre. Me sorprendió. Estaba Raquel al lado, y me dijo que mi madre no lo sabía, que si no habría ido al hospital. Entonces igual la cosa habría cambiado antes, y quizás me podría haber despedido de mi abuela».
Después se enteró de que su progenitora no conocía nada al respecto y pudo entender mejor la situación. Sin embargo, carga contra su prima Anabel a al que culpa del desarrollo de los acontecimientos.
«Mi madre podría decir que yo tampoco llamé con el ingreso de mi abuela, es verdad, pero a mi prima sí que la llamé», afirma. «Mi prima no ha llamado a su tía, tanto que la quiere», Mi madre la tele no la ve. ¿Nadie le ha dicho nada?», sentencia.
Tras todo ello, Kiko ha cambiado el rumbo de muchas de sus decisiones que hasta ahora estaban condicionada por la falta de contacto con su madre. Su guerra parece estar dirigida contra su prima a la que acusa de haber provocado el distanciamiento entre ambos.