En 'Viva la vida' se anunció el fin del pleito familiar. La histórica cifra que piden por la propiedad supera los 10 millones de euros.
Tras año y medio de pleito entre madre e hijo por la venta de la finca Cantora, Isabel Pantoja ha llegado a un acuerdo millonario con Kiko Rivera, quien hasta hace poco había dejado claro que sí o sí vendería la casa.
Venta millonaria
La propiedad ha desatado el drama familiar hasta casi convertirlo en ‘guerra’. Por un lado, está la decisión de la cantante Isabel Pantoja por no vender la finca Cantora, y por el otro, la determinación de su hijo Kiko Ribera en deshacerse de la propiedad.
Tras varios meses de una tensa situación y la amenaza de Kiko Rivera en vender su parte; la madre ha dado marcha atrás y accedió al proceso. No obstante, la cifra es histórica.
Si bien se anunció en el programa de Mediaset, ‘Viva la vida’, la más reciente decisión de la intérprete, la cifra millonaria que piden es histórica: 10,5 millones de euros. Esa sería la cifra por la que Isabel Pantoja accedió a vender la propiedad.
Teniendo en cuenta que hasta hace poco Kiko Rivera había manifestado que vendería su parte en millón y medio, la nueva cifra es considerada por muchos estratosférica.
Acuerdo familiar histórico
Sumada a la venta de la propiedad, algo que destacó en el programa, se une el acuerdo al que habría accedido Isabel Pantoja con Kiko Rivera sobre Cantora, puesto que una vez hecha la venta «tienen un pacto para que, una vez se firme, puedan devolver las cosas a sus hermanos. Encaja con la respuesta de Cayetano y Fran Rivera al retirar la denuncia contra Isabel Pantoja».
De esta forma, no sólo la decisión de acceder ante la solicitud de su hijo por Cantora fue lo que sorprendió a los seguidores de la intérprete, sino al acuerdo familiar que se tiene. Cabe destacar que la insistente determinación de Kiko en vender la propiedad consiste en que «económicamente todos están asfixiados». Por ello, el Dj era el más interesado en vender, e incluso estaba dispuesto a ceder sólo su parte de Cantora.
Con esta decisión, el pleito entre madre e hijo llegará a su fin y Kiko podrá beneficiarse de parte de la herencia que dejó su padre, Paquirri. Situación que, de paso, beneficiaría a sus hermanos.