En los últimos días varias influencers han promocionado en sus cuentas de Instagram la técnica Kundalini, de la que dicen obtener grandes beneficios.
El Kundalini se ha puesto de moda entre las influencers, que utilizan sus redes sociales para promocionar la terapia, una de sus grandes exponentes en nuestro país es Magali Dalix, quien asegura que con ella cambia «mentes, cuerpos y vidas».
Las influencers y el Kundalini
Otras que también lo han probado en su viaje conjunto a Ibiza son; Anabel Pantoja, Nagore Robles, Susana Molina, Madame de Rosa y Jedet. Además de Dulceida quien lo compartió vía stories.
El Kundalini procede de la cultura hindú y se define como el yoga de la energía o de la conciencia, cuyo fin es despertar la energía que está dormida en la base de nuestra columna vertebral, donde se encuentra el primer chakra.
Se suele representar en forma de serpiente enroscada y se identifica con la creatividad que cada individuo posee y a veces desconoce.
Esta variedad de yoga es de las más antiguas que existen y también se le conoce como «la bella durmiente». Ya que una vez que se despierta esa energía, es decir, esa especie de serpiente que asciende por la columna vertebral y va purificándose a través de los diferentes chakras que hay por el cuerpo, se alcanza una gran plenitud física, espiritual y mental.
Mediante esta técnica se pretende activar siete centros energéticos que se encuentran a lo largo de la espina dorsal, para después poder entrar a niveles superiores de conciencia. Aquellos que la practican y defienden que es beneficiosa para: la ansiedad, el estrés, mejora la flexibilidad de la columna vertebral, fortalece los músculos abdominales y refuerza el sistema inmunitario y nervioso.
Además, como en ella se incluye la meditación, aseguran que ayuda a rejuvenecer la mente y el cuerpo, mejora la memoria, favorece el autocontrol emocional y multiplica la creatividad.
La opinión de los expertos
Contrario a esas afirmaciones están los expertos que la califican de pseudociencia, como Luis Santamaría del Río un investigador de la red iberoamericana del estudio de sectas sobre Kundalini, quien la define como:
«Peligrosa porque al final se está asentando en presupuestos mágicos y en ideas que no tienen ninguna correlación con nuestra realidad física ni psíquica». “Una cosa es que estas terapias creen en ellos un impacto emocional y otra que tengan efectividad en sus problemas emocionales. El peligro está en que quienes lo practican confunden una cosa con otra”. «Aparte del coste económico para el paciente, puede haber consecuencias psicológicas severas».
