Ayer 1 de julio, Pablo Díaz ganó el ansiado bote de 1.828.000 euros euros de Pasapalabra, sin embargo, una buena parte del premio se lo lleva Hacienda y se lo reparten entre la Comunidad de Madrid donde él reside, y el Estado.
Esto se debe a que en España todos los premios ganados en la Televisión están gravados. Tras la emisión del programa Pablo acudió a «El Hormiguero» donde aclaró que él recibirá cerca del millón de euros.
Según la tributación de Madrid, la cantidad a pagar al Ministerio de Hacienda por el premio se sitúa en el 43,5% del total ganado. Por lo que la cifra total que a Pablo le toca pagar al fisco es de 795.180 euros.
Una de las normas del programa es que si el concursante gana el bote, el dinero acumulado durante los programas, que en su caso era de 200.000 euros por 260 días, se borra.
El dinero que suelen ganar los concursantes de este tipo de programas, es considerado como una ganancia patrimonial que tributa dentro del IRPF y que se incluyen en las tablas generales de la renta. Si son premios en metálico, el dinero se añade al resto de ingresos que tenga en ese momento el concursante, en el caso de Pablo durante su participación en Pasapalabra, tenía activo un canal en Twitch pero el dinero que ganaba no superaba los 1.000 euros.
Esa cantidad tendrá un 19% de retención en el IRPF, por lo que Pablo al hacer la declaración de la renta le tocará pagar a Hacienda un 43,5%. El porcentaje siempre depende de la comunidad en la que se declare el premio, en este caso un 22,5% se lo llevan las arcas del Estado y un 21% la Comunidad de Madrid.
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