Miguel Bosé ha criticado al periodista Jordi Évole, tras ver el resultado que se emitió de las dos partes de su entrevista en la Sexta.
Miguel Bosé no ha salido del todo contento con la entrevista que concedió a Jordi Évole en México. Aunque se mostró conforme con lo emitido en la primera parte, no ha sentido lo mismo con la segunda, donde ha criticado al periodista por hacerle sentir incómodo.
La entrevista de Évole que no gustó a Miguel Bosé
Durante la entrevista, Jordi preguntó al artista por diferentes aspectos de su vida a sabiendas que hacía muchos años que no se sentaba a dar declaraciones ante un medio español.
Bosé se abrió sobre sus excesos, su problema vocal y su opinión sobre el Covid y la vacuna.
Tras la emisión de la primera parte, Bosé confesó sentirse agradecido con La Sexta e incluso le mandó un audio de voz a Jordi diciéndole que la entrevista fue: «Entrañable, muy respetuosa y muy natural». Fue entonces cuando Évole le respondió con total sinceridad: «No sé si con el segundo vas a salir tan contento».
Y tal y como predijo el periodista, ahora Miguel lo ha criticado en otra entrevista concedida a Carlos Fuentes para Teve Cat, tras ver la segunda parte que se emitió este pasado domingo.
«El me llamó por la admiración mutua que existe entre los dos. Yo accedí y dije que sí. «Acepté pensando que el resultado de la entrevista iba a ser otro, iba a ser mejor, iba a ser más respetuoso. Porque él alardea mucho de que yo soy su amigo. Ya le dije, si tratas así a tus amigos, no sé como trataras al resto».
Una encerrona que no esperaba
El artista dijo que cuando dio su opinión acerca del Covid, al cual llama «plandemia», Jordi le planteó unas encerronas con las que le toco lidiar y que no esperaba.
«Creo que está bien que la gente con ese material que tiene opine y se dé cuenta. Sobre todo se dé cuenta no solo de mi postura, sino sobre todo lo que se deriva de esos momentos del miedo que los oficialistas nos tienen a nosotros los negacionistas».
«Me esperaba de verdad que no hubiese tanta trampa. Además, luego no es solo lo que dices, sino lo que uno puede llegar a editar y cómo lo editó. Hubo dos o tres momentos que fueron feos, pero para él, para mí no. Él se delató como un tipo que tenía que defender una postura y a lo largo de la entrevista se ve que la fue perdiendo».
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