A pesar de las recientes polémicas que ha generado, el Gobierno admite que no tiene ninguna intención de revocarle el título de Rey a Juan Carlos I.
Este martes, 12 de enero, el Gobierno ha admitido que no tiene ninguna intención de quitarle el título de Rey a Juan Carlos I. A pesar de la controversia en la que se ha visto envuelto el Rey emérito, como las investigaciones en la Fiscalía con respecto a sus finanzas, el Gobierno ha aceptado que no tiene en sus planes revocarle el título honorífico y vitalicio, que se le concedió en el 2014.
Juan Carlos I mantiene su título de Rey
Aunque se ha visto en medio de varias polémicas en los últimos meses, el Rey emérito Juan Carlos I mantendrá su título y los beneficios vitalicios que este conlleva.
Así lo ha asegurado el Gobierno, después de que el senador de Compromís, Carles Mulet, le preguntará al Ejecutivo si habían considerado revocar el título honorífico, que no está «contemplado en la Constitución». A esto, el Gobierno respondió diciendo que, «el tratamiento honorífico que se regula en el Real Decreto 470/2014, de 13 de junio, por el que se modifica el Real Decreto 1368/1987, de 6 de noviembre, sobre régimen de títulos, tratamientos y honores de la Familia Real y de los Regentes, está en línea con la senda de precedentes históricos y de la costumbre de otras Monarquías de nuestro entorno«.
Ahora, el decreto que fue modificado en el 2014 cuando Juan Carlos I abdicó en su hijo, y actual monarca, Felipe VI, incluía lo siguiente: «Don Juan Carlos de Borbón, padre del Rey Don Felipe VI, continuará vitaliciamente en el uso con carácter honorífico del título de Rey, con tratamiento de Majestad y honores análogos a los establecidos para el Heredero de la Corona, Príncipe o Princesa de Asturias». Además, doña Sofía cuenta con beneficios similares.
Teniendo esto en cuenta, y tras la respuesta del Gobierno, el senador Mulet cumplió con comentar que dentro de las monarquías que aún están vigentes, como las monarquías de Suecia o de Holanda, no se maneja esta figura de títulos y beneficios. Además, les recordó que incluso los reyes al retirarse dejan el trono sin conservar ningún título, como también reconoció que los monarcas de Bélgica y Luxemburgo, o el emperador de Japón, si conservan sus títulos de «rey emérito».