Hay directores que van de estrellas y acaban estrellándose en la taquilla como M.
Night Shyamalan y hay otros como Tod Phillips que se quedan en un segundo plano pero no hacen otra cosa que acumular taquillazos.
Las cinco comedias que ha dirigido hasta el momento (entre ellas Resacón en Las Vegas y Starsky & Hutch) promedian una recaudación superior a los 100 millones de dólares y eso sin contar el mercado internacional y el hecho de que sus presupuestos raramente superan los 50 millones.
Tras arrasar con su tésis sobre la resaca, Phillips dirige al trío Robert Downey Jr, Zach Galifianakis y Jamie Foxx en Salidos de cuentas, un alocado film que llegará a los cines de medio mundo, incluída España, el 5 de noviembre.
Tres años después de lograr una nominación al Oscar y demostrar su gran timing cómico al dar vida a un delirante actor afroamericano en Tropic Thunder, Robert Downey Jr da vida a un hombre va a ser padre y que ha de cruzar el país con un incordio de compañero de viaje, de otra manera no podrá llegar a tiempo al nacimiento de su hijo.
La película es un cruce entre las clásicas road movies y las películas de colegas que tan de moda ha puesto la generación Appatow en los últimos años.
Aunque un detalle tan nimio como que hayan traducido la película con el absurdo y facilón Salidos de cuentas me echaba para atrás, hay que reconocer que los anuncios que están saliendo hasta el momento son bastante divertidos por mucho que no dejen de ser siempre el mismo con ciertas partes retocadas.
El momento en que el personaje de Downey jr le pregunta al de Galifianakis por qué tiene las cenizas de su padre en una lata parecida a las pringles y este se limita a responder “porque está muerto, tío” es simplemente delirante.
Ojalá la película siga por ese camino.
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