Justo cuanto Warner y MGM llegan a un acuerdo para producir El Hobbit y dan luz verde al proyecto, llega un sindicato de actores mayoritariamente australiano y comienza un boicot a la producción de la película por cuestiones económicas.
A parte de pensar que la película está gafada de antemano, lo primero que nos puede venir a la cabeza es ¿que pintan los australianos en Nueva Zelanda? Es lo que tiene ser un país pequeño, pero es que es a ese país al que le vienen de perlas los 500 millones de dolares que la producción quería invertir allí.
El problema ha sido que, primero como amenaza por parte de Peter Jackson y ahora como resolución sin marcha atrás por parte de Warner, el rodaje va a tener lugar en cualquier sitio menos en Nueva Zelanda, o por lo menos esa es la postura oficial en este momento.
Hasta tal punto esta llegando la cosa que el problema con el sindicato de actores se ha convertido en asunto de interés nacional en el que está mediando el ministro de desarrollo económico.
¿Os imagináis aquí a Elena Salgado batiéndose el cobre por sacar adelante lo último de Amenabar? Pues eso es lo que está ocurriendo en Nueva Zelanda, ya que si el proyecto sale fuera del país, son muchos los que van a quedarse sin su parte del pastel, incluidos los actores que están ahora en medio de la revuelta.
En el lado oscuro, liderando al sindicato esta Helen Kelly a quien podréis escuchar también en este vídeo que curiosamente, tiene lugar en el estudios donde la película tendría que empezar a rodarse.
La entrevista con Jackson y su colaboradora Philippa Boyens, tiene lugar en parte de un decorado oculto al que el director se refiere como la cueva de Gollum, y el resto de la retransmisión está hecha desde la tienda que tienen en Weta para que los visitantes se puedan llevar un recuerdo.
Como digo, el clip es interesante tanto por su contenido como por lo cerca que tiene lugar de donde se produce la magia.
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