Francamente, la trama de Ahora Los Padres Son Ellos me resulta demasiado macabra.
Ya no es que el chico tenga conocer a los padres de su novia, y viceversa, sino que ahora el padre de la novia quiere que el novio entrene para hacer de él en un futuro, cuando muera.
Aunque claro, interpretado por Robert DeNiro y Ben Stiller, lo mismo la cosa pasa de un negro macabro a un verde esperanza repleto de risas.
El filme se estrenó ayer en las salas de cine y, para que recordéis que existe en estas fechas, os mostramos tres nuevos anuncios televisivos.
En una cartelera que sorprende por la falta de estrenos propiamente navideños (más allá de A Casa por Navidad o Las Crónicas de Narnia 3), Ahora Los Padres son Ellos destaca por ser, junto a Los Viajes de Gulliver, la única comedia, animación aparte, destinada al gran público.
¿Le asegurará espectadores ahora que las familias van juntas al cine? Seguramente: Una tercera parte siempre es menos arriesgado, y Los Padres de Ella es una saga lo suficientemente buena en sus dos primeras entregas como para confiar en su supuesto cierre.
Quizá lo único que a muchos nos eche atrás es la presencia de Paul Weitz en la dirección sustituyendo a Jay Roach.
No es que los filmes de Weitz sean malos (en absoluto: Ahí están American Pie o Un Niño Grande para demostrarlo), pero sí que son mucho más olvidables que dos comedias tan sólidas como Los Padres de Ella y Los Padres de Él.
Pese a todo, es indudable que será todo un exitazo.
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