Un servidor tiende más a tener actrices favoritas que actores predilectos pero es innegable que los Oscar masculinos siempre tienen más candidatos dignos del gran premio.
No hay más que comparar los candidatos en las dos categorías de interpretación del pasado año para darse cuenta que, año tras año, se repite la tendencia.
Afortunadamente este año no pasa lo mismo y varias grandes actuaciones se han quedado fuera de la selección final.
Lo más interesante de esta edición será el duelo entre una de las veteranas más estrellonas de Hollywood y la perfecta representación de la generación que dominará Hollywood los próximos años.
O lo que es lo mismo, Annette Bening y Natalie Portman.
La principal incógnita a desvelar el próximo 27 de febrero es saber si la mujer de Warren Beatty volverá a caer por tercera vez en diez años ante una joven ascendente que ha dado con el papel de su vida.
Pobre Annette.
Annette Bening, Los chicos están bienA Favor: Es una de las pocas grandes estrellas en activo que quedan.
Es su cuarta nominación sin premio: se quedó a las puertas por American Beauty.
No van a tener muchas más oportunidades para volver a premiar a una de la s grandes.
En Contra: Su edad.
Oscar las prefiere jovencitas (la cifra de ganadoras del Oscar con más de 50 años edad no alcance las decena).
Bening ha brillado más en otras películas .
Para triunfar debería haber tenido un mayor apoyo de la crítica.
No ha sucedido.
Pronóstico: Si alguien puede derrotar a la gran favorita de la categoría es ella.
No obstante, todo apunta a volverá de nuevo a casa sin Oscar.
Y van cuatro… Nicole Kidman, Rabbit HoleA Favor: A los Oscars le encantan los comebacks y el de la australiana lo es.
Primera nominación en ocho años para una actriz que lo fue todo a principios de la pasada écada.
En Contra: Ya tiene un Oscar y que su película no tenga más nominaciones no ayuda.
No ha ganado ningún premio por este papel.
Pronóstico: Su premio es haber salido del ostracismo en el que lleva atrapada más de un lustro.
Estará encantada de quedarse sentada y aplaudir a la ganadora de turno.
No es para menos.
Jennifer Lawrence, Winter’s BoneA Favor: La crítica se ha enamorado de su interpretación y, a pesar de ser una don nadie, ha sido reconocida por todos los premios.
Hasta los Globos de Oro, esa organización que sólo nominaría superestrellas si pudiesen.
En Contra: A sus 20 años sería la actriz más joven de la historia en llevarse el premio en esta categoría.
Ha gustado a todo el mundo, pero no ha ganado grandes premios.
La competencia es muy fuerte este año.
Pronóstico: Lawrence, como ella misma sabrá, debería ser consciente de que sus opciones son básicamente inexistentes: No es mayor de edad en Estados Unidos y está nominada a un Oscar.
Que lo disfrute.
Natalie Portman, Cisne NegroA Favor:Todo.
Ha arrasado en los premios precursores y da el tipo que la Academia premia habitualmente.
Lleva toda la vida trabajando y es respetada por crítica y público.
Es la única posibilidad seria de que Cisne Negro se lleve un Oscar.
En Contra: El único camino que lleva a una derrota es que, de repente, la Academia se de cuenta de que Annette Bening debería tener un Oscar a estas alturas.
Eso, y que las películas de género nunca han tenido demasiado tirón en las entregas de premios.
Pronóstico: Más vale que se ponga guapa y prepare un buen discurso porque Portman tiene todas las papeletas para recibir el Oscar de las manos de Jeff Bridges.
Nadie se lamentará al respecto.
Michelle Williams, Blue ValentineA Favor: Con tan sólo treinta años, es la musa del cine independiente.
Los medios de comunicación la adoran y la buena prensa siempre ayuda.
Se quedó muy cerca de la estatuilla por su trabajo en Brokeback Mountain.
En Contra: Blue Valentine es una película muy pequeña que, seguramente, no ha sido vista por buena parte de los académicos.
No es lo mismo conseguir la última nominación en extremis que ganar.
Pronóstico: No va a pasar.
Michelle es una actriz fantástica y, si no pasa nada, volverá a ser nominada dentro de poco tiempo y a la tercera podrá ser la vencidad.
Quién va a ganar: Natalie Portman.
Quién merece ganar: Por mucho que Bening merezca un Oscar, este es el año de Natalie Portman.
Quién debería estar nominado:Alguien decidió que Bening y no Julianne Moore merecía la gran campaña promocional para conseguir el Oscar.
No es su mejor papel, pero su trayectoria la avalaba.
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