¿Qué pasaría si una persona pudiese convertirse en la mejor versión de sí misma? Esa es la premisa de Sin límites, el nuevo thriller al servicio de Bradley Cooper, Abbie Cornish y Robert De Niro, estrellas del regreso a la dirección de Neil Burger (El Ilusionista).
El 8 de abril será la fecha en la que Cooper tendrá la oportunidad de demostrar su potencial como estrella después de papeles secundarios pero fundamentales en El equipo A o Resacón en Las Vegas.
La película es la eterna demostración de lo mal que se lo montan las distribuidoras españolas con los títulos.
Es cierto que el título del film en nuestro país es casi literal al original Limitless, pero volvemos a ver cómo se estrenan dos películas en España con el mismo nombre en sólo unos meses.
Si hace unos meses veíamos el segundo Como la vida misma en tres años, en 2008 ya hubo un Sin Límites que pasó sin pena ni gloria por las carteleras.
Cooper es un escritor que sufre de bloqueo creativo y ve cómo cambia su vida de un día al otro al probar una nueva droga que le permite la capacidad de usar todo su cerebro.
Tan pronto no es capaz de entregar la primera versión de su novela como se convierte en millonario en la bolsa de Nueva York en poco más de veinticuatro horas.
Un poderoso financiero de Wall Street querrá descubrir qué hay detrás de tanto éxito, al igual que unos peligrosos contrabandistas que quieren hacerse con una remesa de las pastillas para traficar con ellas.
El trailer español confirma las sensaciones que nos habían dejado las primeras imágenes: un thriller efectivo pero excesivo y un tanto absurdo.
De todos modos tampoco hay que ser particularmente duros con un producto que claramente no busca otra cosa más que entretener a las audiencias durante 100 minutos a base de un par de giros efectivos y un par de estrellas resolutivas.
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